Mercasevilla y los ERE van quitando a todos sus caretas

JAVIER ROND

14/02/2011 a las 01:51h.

Espadas se retrata

D El deambular mediocre del candidato socialista a la Alcaldía de Sevilla en su campaña de vacía sonrisa y huecos mensajes tocó fondo hace varios días, cuando los periodistas, claro, le preguntaron por lo que está ocurriendo con Mercasevilla y los ERE, el mayor escándalo que se recuerda a nivel local, regional y veremos qué más. Pero ni siquiera ahí, oportunidad única para desmarcarse de predecesores y, sobre todo, de la corrupción, supo Juan Espadas aparcar un rato la estúpida y barata mercadotecnia que le acompaña. El cáncer de los políticos actuales, absorbidos por el arqueo de una ceja o el papelito que le pasa por la espalda un asesor cualquiera. En un alarde de cinismo histórico, el aspirante se limitó a criticar al PP por denunciar los hechos incluso en Madrid «perjudicando la imagen de Sevilla en el exterior». Ni media condena a los métodos sucios de sus compañeros de filas. Y es que la obediencia ciega a unas siglas y a la dirección provincial socialista, ahora señalada y en

tenguerengue, tiene estas cosas. Manda quien manda —aunque ahora ni se acerque a su lado a recorrer los barrios y plantarse ante los medios—. A callar, a posar en los carteles y a cacarear el argumentario que el partido ha pasado a todos ponga éste lo que ponga. ¿Qué hubiera dicho Espadas del fraude de los ERE si fuera el PP el que gobernara? Es más, ¿qué le gustaría decir realmente en estos momentos? Pero se limita a vender la «Sevilla en positivo» sin pararse en la excepción. Mañana tiene ocasión de enmendar la cuestión en el debate televisivo a tres bandas. Él y Torrijos.

Desmarques

D Entretanto, los movimientos fuera de focos en el PSOE sevillano son múltiples y estridentes. Porque llega el momento del «nadie conoce a nadie» y de no aparecer demasiado cerca de José Antonio Viera, Cuestión de supervivencia. «Otra vez hay un movimiento grande contra la dirección, es demasiado tiempo, son demasiadas cosas», explicaba alguno en los pasillos de la convención municipal del PSOE de este fin de semana, en el que muchos han buscado la puerta más que la foto. Y si Viera es evitado, como Antonio Rivas, Javier Guerrero, otrora ojitos de los primeros, es directamente repudiado. Sin trabajo, sin los amigos de antes, culpado por el partido y la Junta, ahora todos le señalan, especialmente para salvar el trasero propio. Pero muchos son los mismos que han aplaudido sus métodos y le han acompañado en comidas y luchas partidistas. Otros se apresuran a aclarar que «jamás» estuvieron con él en una mesa con una cerveza y que nada tienen que ver con sus andanzas en la

Dirección General de Trabajo, como el alcalde de Constantina, Mario Martínez, o el ex de Guadalcanal, Carmelo Montero. Los dos llamaron a este periódico para desmarcarse del denominado «clan de la Sierra Norte». Habrá otros que, al final, dirán que tampoco conocían a Viera...

Esas listas...

D Entre hoy y mañana va a quedar ultimada la lista electoral del socialista Espadas, que se terminará por definir con la pelea interna de estas horas. Deben ser fijos en la misma Alberto Moriña, Esther Gil —ambos muy próximos a Susana Díaz— y Joaquín Díaz, además de Evaristo Troya, que se cobrará debidamente su paso del bando cercano al alcalde al regazo de la dirección provincial. Pero el vierismo cotiza a la baja tras los golpes a su núcleo duro y el bando menos afín al aparato intenta colocar todas las piezas que puede. Parece obvio que la familia de Alfonso Rodríguez Gómez de Celis tendrá representación, probablemente la de Encarnación Martínez o incluso a David Hijón o Rafael Pineda. Alfonso Mir tendrá el respaldo de haberse comido el marrón de dirigir políticamente Mercasevilla en el peor momento y resolver el espinoso tema de las horas extra de la Policía Local. Otros como Francisco Fernández o Nieves Hernández, lo tienen más difícil, aunque ni siquiera

ellos renuncian.

Cosas de la polución

Una de las tradicionales gracietas semanales del Ayuntamiento llegó el miércoles desde Medio Ambiente, que envió a los medios una nota para destacar que la ciudad «disfruta de un aire limpio» y no sufre la «crisis de contaminación» de «otras ciudades españolas». El sarcasmo en el PSOE no tiene fin cuando se trata de criticar al PP, como en este oportuno debate creado con la polución en Madrid. Algo en lo que están muy interesados los sevillanos, sin duda. Al golpe facilón se sumó en su blog Antonio Rodrigo Torrijos. «En Sevilla podemos respirar tranquilos», tituló con foto de Madrid, claro, aunque también citara a Barcelona. Respirar tranquilos, aire limpio... Mejor no jugar con las metáforas.