Suscríbete a
ABC Premium

Sabotaje con una batidora en varias clases en la Universidad de Sevilla

Dos jóvenes se cuelan en Derecho y Económicas, sacan leche, manzanas y plátanos y se hacen un batido para grabarlo y colgarlo en las redes sociales

El equipo rectoral tratará el tema esta semana después de que los decanos hayan calificado las conductas como «inadmisibles»

Le pillan copiando con unas gafas 'inteligentes' en un examen de Derecho en Sevilla

Facultad de Económicas de Sevilla ABC
Mercedes Benítez

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Sacaron la batidora, la tabla de cortar, leche, plátanos y manzana, y le dieron al botón para encender a toda marcha el electrodoméstico y hacerse un batido en plena clase en la Universidad de Sevilla. Es la «broma» con la que dos jóvenes intentaron «reventar» varias clases de al menos dos facultades de la Hispalense, las de Derecho y Económicas, en una acción que grabaron y luego han colgado en las redes sociales jactándose del tema y logrando numerosas visitas.

Ocurrió el pasado miércoles 5 de octubre en el turno de mañana de la Hispalense, cuando los protagonistas de la gamberrada se colaron al menos en dos clases del campus de Ramón y Cajal, en una clase de Derecho Constitucional y luego en otra de Económicas.

Los dos jóvenes, que han hecho varias versiones del vídeo que ha corrido por los chats universitarios, se sentaron en clase y sacaron la tabla cortadora, donde partieron la fruta y luego añadieron la leche. Conectaron la batidora a uno de los enchufes que hay en las aulas y lo pusieron a toda marcha provocando un gran ruido en la clase.

Aunque la mayoría de los alumnos testigos de los hechos se lo tomaron a broma, el estruendo provocó el enojo de los profesores. Incluso los individuos llegaron a pedirle azúcar a los profesores. «Maestra, tiene un poco de azúcar», le espetaron, provocando la indignación de los docentes.

En el caso de Económicas, la profesora les reprendió nada más escuchar el ruido que interrumpía sus explicaciones. «Eso lo tienes que hacer fuera del aula. Si quieres hacerte un batido te vas fuera del aula», les reprendió. Como no le hacían caso, les advirtió de que si no se marchaban llamaría a seguridad, lo que provocó que tuvieran que marcharse apresuradamente ante la advertencia de que la cosa se ponía seria.

Sin embargo, no contentos con esa primera intentona, luego cruzaron la avenida Ramón y Cajal y se colaron en una clase de Derecho para repetir la acción durante la hora de Constitucional. Ambos, que actuaron en connivencia con un tercer joven que es el que se encarga de grabar la acción, pasean riendo por las afueras del campus hasta entrar en una clase de Derecho, donde repitieron la «gracia».

Un youtuber explotador

Con la ayuda de un alargador para conseguir enchufar la batidora, volvieron a hacerse el batido y a pedir al profesor que les facilitara azúcar. «No nos importa que sea azúcar moreno», le dijeron. El profesor obviamente les amonestó por estar haciendo ruido e interrumpir la clase, ante lo que contestaron en tono jocoso: «en Amazon ponía que la batidora era silenciosa». Finalmente fueron expulsados.

El principal protagonista, que va narrando toda la acción, es un chico que, según sus redes sociales, estuvo matriculado en un ciclo de FP en un colegio de Sevilla pero lo dejó porque quería ser youtuber. Previamente y estudió previamente en un instituto de La Unión (Murcia) y todo indica que no debe ser alumno de la Hispalense.

Además el joven, que utiliza expresiones características murcianas y tiene un segundo apellido de origen alemán, trabaja como fotógrafo, productor de vídeo y diseñador gráfico y fue denunciado por los editores de youtubers por «explotar» a los que contrataba para hacer sus vídeos. Según parece, pretendía pagarles 70 céntimos por cada pieza para hacer las grabaciones que luego subía a las redes sociales. En cuanto a los otros dos, el que le acompaña y el que graba, al menos uno de ellos también podría ser de Murcia.

Los decanos, indignados

El tema ha causado una gran indignación entre el profesorado y ya ha sido puesto en conocimiento del Rectorado que, al parecer, tratará el asunto en la próxima reunión del equipo rectoral. El decano de Económicas, Antonio Navarro, se ha mostrado «indignado» por lo ocurrido y ha explicado que es probable que no sean alumnos de la Universidad de Sevilla.

«Nosotros estamos pidiendo que se depuren responsabilidades y que si no son alumnos de la Universidad caigan sobre ellos las responsabilidades penales que correspondan», explicó Navarro que considera que se trata de una consecuencia del mal uso de las redes sociales.

Por su parte el decano de Derecho, Alfonso Castro, ha pedido que, ante este tipo de comportamientos que «atentan contra la dignidad e incluso la seguridad de los profesores y el derecho de nuestros estudiantes a recibir sus clases del modo adecuado« reaccione la Universidad de modo claro y contundente y sin dilaciones.

En cualquier caso, otras fuentes de la Universidad de Sevilla aseguran que la Inspección Docente ya ha sido informada, igual que el Vicerrectorado de Estudiantes, los servicios de seguridad y el gabinete jurídico.

Otros profesores de la Hispalense dijeron a ABC que se sienten «desvalidos» antes este tipo de comportamientos y, sobre todo, ante el abuso de los teléfonos móviles durante las clases, ya que algunas veces se ven obligados a parar las explicaciones por ello. Algunos están pidiendo que se prohíba el uso de los celulares en clase y así lo han puesto en sus proyectos docentes.

Los jóvenes, que el curso pasado hicieron otras grabaciones tomando cervezas dentro de clase, amenazan al final del vídeo con seguir actuando así. «Esto es ya una tradición», dicen. Si, como se quejan algunos profesores, la Universidad de Sevilla no actúa, estos comportamientos seguirán produciéndose.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia