Tiendas abiertas en domingo, pero también protestas. Gritos e insultos es lo que ha habido esta mañana en el centro de Bilbao. Los clientes de las tiendas entraban y salían en medio del bullicio y sobre todos abochornados por la situación que han tenido que vivir. La Ertzantza ha tenido que intervenir  proteger esta tienda para que pudiera trabajar. Y los consumidores querían poder comprar en libertad. Sin embargo, desde los sindicatos vascos aseguran que la apertura de las grandes superficies supondrá a medio plazo el cierre del pequeño comercio. Parece que esta guerra entre sindicatos y comercios de grandes superficies acaba de comenzar y dará mucho que hablar.