En Atlanta, Estados Unidos, ha comenzado el juicio contra los cuatro presuntos autores de la muerte de un adolescente durante una fiesta. El joven, agredido por sacar buenas notas, murió a consecuencia de los golpes y patadas que recibió. La agresión se produjo cuando la madre del anfitrión decidió acabar con la celebración. En la fiesta se habían presentado 75 personas, aunque sólo diez habían sido invitadas.