Los Mossos d'Esquadra siguen trabajando para esclarecer quién está detrás del terrorífico crimen ocurrido ayer en Abrera, Barcelona. Un hombre y una mujer embarazada de seis meses aparecieron descuartizados en el congelador de su casa. En el chalet vivían también el hermano de la víctima y su pareja, que ahora se encuentran en paradero desconocido. La policía científica está a la espera de la autopsia para confirmar las causas exactas de la muerte. Los vecinos, consternados, apuntan a que todo se debió a una discusión familiar.

