Conferencia de Myriam Seco, egiptóloga, «El Nilo y sus riquezas: experiencias arqueológicas en el país de los faraones»

Luxor nº 5

EN ESTE MUNDO supuestamente dilucidado y más que visto, la arqueología es una de esas escasas reservas de sorpresas y secretos, capaces todavía de arrasarnos de fascinación. Los arqueólogos son –en efecto- los últimos aventureros y descubridores, los verdaderos profesionales de la melancolía. ¿Cuántas vidas e historias permanecen sepultadas bajo avenidas y edificios de nuestra ciudad? A veces las esquirlas de esas vidas y los escombros de aquellas historias consienten que los arqueólogos escriban libros más persuasivos y seductores que cualquier novela, y Sevilla es una ciudad felizmente propicia para los arqueólogos, pues aquí uno pone un párking y le crecen los romanos. Sin embargo, ahora debo advertir que una cosa son los arqueólogos y otra muy distinta los egiptólogos.

Egipto siempre ha convocado sueños y curiosidades patinadas de misterio y estupor. Así, a todos nos concierne Egipto y todos tenemos una sensación de Egipto, aunque sólo sea a través del cine, la historia, los museos o la Biblia. Por lo tanto, ¿habrá algo más fascinante que ser egiptólogo? Pues sí, ser egiptóloga como Myriam Seco.

Doctora en Historia Antigua por la Universidad de Sevilla y especializada en Egiptología en la Universidad de TÌbinga, Myriam Seco no sólo es una de las más prestigiosas egiptólogas del mundo, sino alguien que ha sabido convertir el talento en aventura, el rigor en placer y el conocimiento en una manera de estar en el mundo. La egiptología ha progresado mucho desde que Champollion descifró la Piedra de Roseta o desde que Lord Carnarvon y Howard Carter descubrieron la tumba de Tutankamon, pero ni las nuevas tecnologías ni los instrumentos más sofisticados le han arrebatado a Egipto el aroma grandioso de la épica y las maldiciones, del trasmundo y de las faraonas fatales. Esa fragancia que ya nos envuelve esta noche -«Luxor nº 5»- porque es el perfume de Myriam Seco.

Después de exhumar uno de los colosos del Templo de Amenophis III, después de explorar las ciudades sumergidas de Alejandría y después de rodar una película remontando el Nilo, Myriam Seco partirá dentro de unos días hacia el Líbano para rescatar los tesoros de un naufragio griego. En el mar, en el desierto o en el lecho del Nilo, esquirlas de vidas y escombros de historias llevan miles de años esperando a una egiptóloga sevillana. Miles de años aguardando a que Myriam Seco les devuelva su historia y sus vidas.

F.I.C.

Sevilla, 16 de Mayo de 2006