El historiador abrió ayer el Aula de Cultura de ABC de Sevilla con una conferencia en la que trazó un recorrido, pleno de poesÃa, por la historia de nuestro paÃs, por la «hermosa y áspera España
El Aula de Cultura de ABC, que patrocinan la Real Maestranza de CaballerÃa de Sevilla y el Banco Sabadell, emprendió ayer la andadura de un nuevo curso con un conferenciante de lujo. Catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad de Deusto, director de la Fundación Vocento y de la Fundación Dos de Mayo Nación y Libertad, humanista, historiador y escritor, Fernando GarcÃa de Cortázar encandiló al auditorio que se dio cita anoche en el Hotel Alfonso XIII con una poética disertación sobre la «Hermosa y áspera España». El director de ABC de Sevilla, Ãlvaro Ybarra Pacheco, presentó al conferenciante no sin antes dedicar unas palabras de recuerdo a Fernando Iwasaki, quien con tanto acierto ha dirigido en los últimos años este Aula de Cultura y cuyos compromisos profesionales le impiden seguir haciéndolo.
A continuación, Ybarra Pacheco destacó el carácter erudito de GarcÃa de Cortázar, «su amplÃsimo conocimiento de la historia de España, divulgada a través de sus cincuenta y siete libros y sus centenares de artÃculos y conferencias, no están reñidos âdijoâ con un formidable talento narrativo ». No pasó por alto el director de ABC de Sevilla el «rigor cientÃfico» del conferenciante como historiador ni su «sensibilidad literaria» con la que ha logrado que sus obras sean «hermosas, amenas y didácticas». Resaltó la «incansable labor de pedagogo de la historia» de Fernando GarcÃa de Cortázar, sus numerosos reconocimientos y premios âentre ellos el Nacional de Historia de 2008â y algunos de sus tÃtulos más conocidos. «Su última obra, âLeer Españaâ, es un intento originalÃsimo por contar nuestra historia desde la mejor literatura. Sin confundir las novelas con la realidad ni la literatura con la historia, GarcÃa de Cortázar está convencido de que los buenos libros son un camino extraordinario y entretenido para profundizar en el conocimiento de cualquier época», señaló el director de ABC de Sevilla. De hecho, la intervención de este historiador en el Aula de Cultura fue un buen ejemplo de ello. Trazó Fernando GarcÃa de Cortázar un recorrido por la historia de España, aderezado por la palabra poética de autores que han ido haciéndose eco del palpitar de nuestro paÃs. El recuerdo lÃrico de Luis Rosales, Antonio Machado, Jorge Manrique,Garcilaso de la Vega, Gerardo Diego,Gonzalo de Berceo, Miguel de Unamuno, Alberti, Neruda… y tantos otros, fueron abriéndose paso en su disertación.Yes que, según advirtió GarcÃa de Cortázar, «más allá de castillos y epopeyas marÃtimas, la memoria de España, su latido, es el fulgor que sus muertos anhelaron y la esperanza que tiende la vida sobre el silencio del futuro». Hispania, Toledo, Al-Andalus, Sefarad, América, España… un mosaico de términos que proyecta, aseveró, «un perfil de quimera y otro de sombra, un esplendor de voces y pueblos y otro de silencio y ceniza».
Pero también una«tierra de aluvión humano y cultural, de tránsito entre Europa y Ãfrica, el Mediterráneo y el Atlántico », como da fe su devenir histórico, en el que el conferenciante fue adentrándose desde el eco lejano de los navegantes fenicios, griegos y cartagineses o la rivalidad entre Romay Cartago, la presencia de los visigodos, los musulmanes… Un «canto mestizo» que la historia de España siguió tejiendo en la Edad Media con las tradiciones espirituales cristianas, judÃas y musulmanas.Y en el horizonte una fecha, 1492, que señala «un tiempo de intolerancia, pero también el año en el que Colón descubre en el Atlántico otro perfil hispano: América». Andando en el tiempo, no todo será destierro en la España de los siglos XVI y XVII. «Carlos V y Felipe II hacen cabalgar a los españoles por tierras de Europa y modernizan el Estado. Yla leyenda negra queda contrarrestada por una estirpe de artistas y escritores que elevan el prestigio del castellano en todo el mundo y hacen del arte español una seña de identidad », indicó GarcÃa de Cortázar. En el siglo XVIII, los reformistas ilustrados se alzarán como protagonistas de la centuria. Más adelante , y por los mismos años en que el sueño liberal, «triturado por la represión de Fernando VII, pugna por hacerse realidad, otros españoles defienden la libertad en tierras americanas frente al absolutismo de la metrópoli»… Viajes, en suma, de ida y vuelta a lo largo de la historia, «a través de un mar hecho de utopÃa e intercambios», que han tejido,auno y otro lado del Atlántico, «un tapiz mestizo, completado en el siglo XXI con los hispanoamericanos que hacen el camino de España »,un camino que, junto a la emigración procedente de Ãfrica, «viene hoy a enriquecer âapuntó GarcÃa de Cortázarâ la rica vena de la España mestiza de ayer».
Los padres constitucionales El afán por alcanzar un modelo progresista se asomará y esconderá a lo largo del XIX, dejando «proyectos frustrados, guerras civiles y resentimientos ». El siglo XX también será «un tiempo de quimeras sociales». «La utopÃa republicana de Azaña, Madariaga o Américo Castro se hace pedazos en una guerra civil que ensangrienta España». «Tras el parte victorioso de Francoâ recuerda el historiadorâ medio millón de españoles marcha hacia el exilio, entre ellos el 90% de la inteligencia del paÃs». Dejada atrás la pesadilla de la posguerra, los años 60 dan un vuelco a la economÃa española que no conseguirá, sin embargo, llevar la esperanza a la España rural, que buscará trabajo fuera del paÃs. De nuevo, la partida, y en el horizonte una luz: «Sólo muerto el general, el ayuno electoral de los españoles toca a su fin. Tras desguazar el artificio polÃtico de la dictadura, los padres constitucionales de 1978 reconstruyen el paÃs con la vista puesta en Europa. Es un tiempo de pactos, de transacciones, de olvidos y nostalgias traicionadas.
Por fin, como deseaba Caballero Bonald en los sombrÃos años de la dictadura, la Historia Española escribÃa la letra libertad», concluyó GarcÃa de Cortázar.