FÉLIX IGLESIAS

VALLADOLID. El grupo Celtas Cortos ha donado los derechos de «Amor al vino», una de las canciones de su reciente disco «40 de abril», a la Fundación Emilio Moro, dedicada a la promoción de proyectos humanitarios en los países subdesarrollados. Para celebrar esta colaboración, la bodega Cepa 21, de la Ribera del Duero, acogió ayer la presentación del nuevo trabajo discográfico de la banda vallisoletana con un breve concierto en el que interpretaron varias de las canciones del nuevo álbum, incluyendo «Amor al vino», que contó con los coros de Javier y José Moro, dos de los propietarios de Cepa 21, perteneciente al grupo Emilio Moro.

Jesús Cifuentes, cantante y guitarrista de Celtas Cortos, aseguró que el vino forma de «nuestro paisaje y paisanaje», por lo que los pucelanos no dudaron un instante cuando los hermanos Moro les pidieron que compusieran una canción en torno a la bebida de Baco, y aunque calificó como «homenaje tabernaria» a «Amor al vino», Cifu aclaró que el último corte de «40 de abril» está compuesta desde el respeto y la belleza.

En este sentido, José Moro recordó que la trayectoria entre el grupo bodeguero y los músicos vallisoletanos es pareja en las dos últimas décadas, «pues nos hemos desarrollado, cada uno en su campo, al mismo tiempo». Por ello, no es de extrañar que los Moro y los Celtas Cortos formen «una fraternidad» que les ha llevado a colaborar con la Fundación Emilio Moro, que vela por el desarrollo de proyectos para el desarrollo de infraestructuras de suministro de agua potable en países subdesarrollados. «Colaboramos con proyectos ya definidos por la ONU, y con el apoyo como los de Celtas Cortos, entre otros, podemos ayudar aquellos que no tienen casi nada», precisó José Moro.

Tras cumplimentar a los medios de comunicación, los Celtas Cortos se subieron al escenario e interpretaron «Emoción», «Un millón de motivos», «Tú eres lo mejor», «Retales de una vida» y «Amor al vino», esta última con los coros de los hermanos Moro, también partícipes en el disco. Como recordó Óscar, bajista de la banda, «en directo es donde realmente somos un grupo, pues nos permite tener un tú a tú con nuestro público y que los conciertos no sean de Celtas Cortos».