Seis intervenciones parciales y una casi completa
El trasplante de cara aún es una cirugía experimental. Desde que la francesa Isabelle Dinoire se convirtiese en la primera persona del mundo en recibir un trasplante de cara, la intervención sólo se ha repetido en siete ocasiones más: cuatro en Francia, dos en Estados Unidos y uno en China. Todos, salvo uno, han sido parciales. En la gran mayoría de los casos, los cirujanos han optado por cambiar sólo una parte del rostro afectado y los resultados han sido muy satisfactorios, tanto funcionales como estéticos. Los más cuestionados, desde el punto de vista de la imagen, han sido los de Connie Culp, la paciente con la mayor proporción de la cara trasplantada.

Culp recibió su nuevo rostro en diciembre de 2008 en la Clínica Cleveland de Ohio (EE.UU.) Su marido le había disparado durante una pelea y le destrozó el 80 por ciento de su faz. Con la nariz, un ojo y las mejillas borradas de un disparo, no podía casi ni hablar, reír, comer o respirar por la nariz. Tampoco tenía sentido del olfato ni del gusto, pese a las 30 operaciones por las que había pasado antes de someterse al mencionado trasplante.

Después de recibir el 80 por ciento de la cara de otra persona volvió a comer, a beber y a respirar sin dificultad, aunque su rostro no ha vuelto a ser ni de lejos el que tenía Connie de antes de la agresión.
La Fe de Valencia, el Virgen del Rocío de Sevilla y ahora el Hospital Vall d´Hebron de Barcelona. Ya son tres los equipos de cirugía que compiten por realizar el primer trasplante de cara que se haga en España. El centro catalán ha sido el último en solicitar la autorización, pero nada impide que sea el primero en hacer esta cirugía pionera de la que sólo hay siete casos en todo el mundo.
Ayer, pocas horas después de hacerse pública la noticia, el responsable del equipo médico del hospital barcelonés que llevará a cabo el trasplante, el doctor Joan Pere Barret, comparecía ante la Prensa para dar más detalles sobre la futura intervención. Barret se mostró cauto respecto a cuándo se llevará a cabo y quiso dejar claro que «los tres hospitales autorizados no compiten». «El primero en realizarlo será el que dé con un donante más compatible que garantice el éxito de la operación», subrayó.
Donante compatible y joven Respecto a cuándo llegará el día «D», tanto él como el responsable de Trasplantes del centro, Pere Salamero, se mostraron cautos. «Puede ser en unos meses o esta misma tarde, depende de cuando se localice al donante óptimo», apuntaron. «No es como coger un ticket en el supermercado, que el que llega primero, primero se sirve», dijo Salamero. Tanto él como Barret coincidieron en la necesidad de que sea menor de 45 años.
Los facultativos no quisieron dar detalles sobre la identidad del receptor, aunque sí avanzaron que «se trata de un caso desesperado para el que no hay otra solución». «Se trata de una persona joven con problemas de funcionalidad que trascienden la cuestión meramente estética y que ya ha pasado, sin éxito, por varias intervenciones», señaló el doctor Barret, responsable del Servicio de Cirugía Plástica y Reparadora del Vall d´Hebron.
El hospital elevó a mediados de julio su petición a la Organización Catalana de Trasplantes (OCAT)y el día 23 del mismo mes recibió el sí. Cuatro días después, el 27 de julio, la remitió a la Comisión Nacional y ésta le dio ayer el visto bueno final.
El paciente que ha presentado Barcelona es «un caso grave y un candidato claro de trasplante de cara», aseguró ayer a ABC Rafael Matesanz, director de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT). «Las alteraciones que sufre en el rostro no sólo son estéticas, también son funcionales. El daño le ocasiona problemas para deglutir y respirar. No podíamos dejar pasar más tiempo». Según ha podido saber este diario,el equipo de Barcelona tiene previsto hacer un trasplante parcial.
Una intervención parcial No se cambiará la totalidad del rostro. La solicitud de Barcelona prevé trasplantar parte de la nariz, el párpado y la zona de la boca, aproximadamente el 60-70% de la cara.
Joan Pere Barret indicó ayer a ABC que el centro, que está en contacto permanente con los otros equipos internacionales con experiencia en estas intervenciones, ha descartado practicar, además, un alotrasplante de médula ósea realizado en Francia con el fin de mejorar la compatibilidad entre donante y receptor. «Este tipo de técnica está aún en fase muy experimental y no se ha demostrado su absoluta efectividad», dijo Barret. En cuanto a resultados, el responsable del Vall d´Hebron adelantó que el paciente recuperará casi el 100% de movilidad. Por su parte, el director gerente del centro, José Luis de Sancho, destacó la trayectoria del hospital en el campo de los trasplantes e indicó que la autorización es «un reconocmiento a esta trayectoria».
El primer trasplante de cara en España es inminente. Los tres hospitales están preparados y el verano, con más víctimas jóvenes por accidentes, favorece la donación.

Enviar a:

¿qué es esto?


Más noticias sobre...