El estudio «Lo que vive en el mar» arroja más datos sobre el medio más desconocido, aunque más extenso, del planeta.
Tres océanos bañan el rico ecosistema australiano, que se extiende desde el trópico de coral hasta el helado Polo Sur. Quizá por ello acoge unas 250.000 especies sin identificar.
La mayoría de las 33.000 especies registradas eran aves y mamíferos, así como nuevos peces y tiburones.
En la Gran Barrera de Coral, en el noreste australiano, habitan el mayor número de especies, como corales, delfines, tortugas y cerdos marinos.
El entorno marino japonés, por su parte, cubre una superficie 11 veces mayor que su masa territorial. Y a 10 kilómetros de profundidad se encuentran corales y otros ecosistemas. Sólo 33.000 de las 155.000 especies que han sido oteadas en aguas niponas han sido inventariadas por los científicos.
La investigación en el Polo Sur es esencial para entender el proceso del cambio climático, ya que es de las regiones más afectadas por el calentamiento global.
El 90% de la vida marina en la Antártida se encuentra a más de un kilómetro bajo la superficie del océano y sólo un 11% -9.000 especies- ha sido estudiado.




