El Príncipe Guillermo y su prometida Kate Middleton han acudido esta tarde a la Abadía de Westminster para ensayar seguramente por última vez la ceremonia de su boda, que se celebra este viernes en ese templo del centro de Londres.
En la prueba han participado los padres de la novia, Michael y Carole Middleton, que se alojarán durante los próximos tres días en el lujoso hotel Goring de Londres, de donde saldrá Kate para dirigirse a la abadía. También han estado presentes su hermana, Philippa, que será la dama de honor, y su hermano James.
El Príncipe Enrique, que será el padrino del novio, ha participado también en el ensayo, así como todas las autoridades religiosas que oficiarán la ceremonia del viernes, entre ellos el arzobispo de Canterbury y primado de la Iglesia anglicana, Rowan Williams, quien casará a la pareja, y el reverendo Richard Chartres, encargado de dirigirse a la congregación.
Decorada para la ocasión
Los novios y sus familiares habían participado en ensayos anteriormente, pero ésta es la primera vez que lo hacen en la propia Abadía de Westminster, que está siendo decorada para la ocasión con árboles y flores especialmente seleccionados.
A menos de dos días para el gran momento, aumenta en Londres el ambiente nupcial, con multitud de periodistas tomando posiciones y decenas de personas acampadas a las puertas de la abadía para asegurarse una buena posición el día de la boda.
