Cerca de medio centenar de mujeres que viven en contextos de prostitución han recibido durante las semanas que llevamos de confinamiento el apoyo de Cruz Roja. 

En concreto, han sido 46 las mujeres, de diez nacionalidades diferentes (como Rusia, Rumanía, Colombia, Nigeria, Nicaragua y España), que ha atendido la institución humanitaria en estas circunstancias. "Sin duda una de las realidades más invisibles y vulnerables en estos tiempos del coronavirus”, tal y como advierte Rocío Arimón, técnica del área de Mujer de Cruz Roja.  

Dicha atención, que la entidad ofrece de forma habitual a este colectivo a través de sendos proyectos para la intervención con personas víctimas de trata (con financiación de la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación) y mujeres que se encuentran en contextos de prostitución, se ha intensificado desde que se decretó el Estado de Alarma, en aras a tratar de cubrir las necesidades básicas de todas ellas.

Así, a la atención psicosocial y jurídica y al apoyo humano que les ofrece el voluntariado de la organización se ha sumado en estas semanas –en las que han sido varios los casos de trata de personas con fines de explotación sexual detectados- la entrega de ayudas para alimentación, productos de higiene y medicamentos.

Dichas acciones se enmarcan dentro del Plan "Cruz Roja Responde" frente al Covid-19, que contempla, entre otras acciones, el reparto de alimentos y otros bienes de primera necesidad; la atención y seguimiento telefónico de personas vulnerables y población de riesgo; el apoyo escolar por videollamadas; la distribución de comida, agua y productos de higiene en asentamientos de inmigrantes; la ayuda a personas sin hogar para que encuentren un lugar donde dormir; o acciones relacionadas con el empleo, como píldoras formativas y orientación laboral durante el periodo de confinamiento.