Era un plan familiar de concierto pero terminó siendo muy especial. Paula López Vaquero, de Córdoba y con 10 años, subió al escenario con Pablo López e interpretó con el malagueño su tema "No!". Su talento dejó impresionado al cantante y también al público que acudió el pasado viernes al Palacio Vistalegre de Madrid.

«Desde que compramos la entrada hace tres meses, todos los días recordaba que íbamos a ir al concierto. Admira mucho a Pablo López, le encantan sus canciones y por eso también cogimos un pase VIP que permitía escuchar unos temas antes de la actuación con un público reducido», cuenta el padre de la menor, Miguel Ángel López Raso.

Que Paula subiera al escenario fue un impulso propio. «Mientras estábamos en el pase con público reducido, en una de las veces que el cantante pasó delante de ella entre tema y tema, Paula le gritó que quería cantar con él y el artista le dijo: "pues sube"».

Lo que no se esperaba es que Paula iba a revolucionar al público con su voz. «Le pidió cantar "No!"» y Pablo López soltó una carcajada comentando que era un tema difícil». Empezó tocando unos acordes y cuando Paula entonó, se sorprendió. Así que se colocó al piano y siguieron juntos el tema que el malagueño canta con Miriam Rodríguez.

Esto, que parece una anécdota, es una lección de Paula. La pequeña es espontánea e inocente, pero también autista. Su talento es fruto de un gran esfuerzo y constancia de ella, su familia y sus profesores de la escuela Yocanto de Córdoba. «Estamos muy agradecidos porque en la escuela, a pesar de sus dificultades para el aprendizaje y la comunicación por tener Trastorno del Espectro Autista (TEA), se han esforzado por trabajar con ella de forma adecuada, buscando profesionales del autismo, estructurando la clase e incluso haciéndola partícipe de todos los recitales con sus compañeros», explica López Raso.

La música es la pasión de Paula, que ya cuando tenía un año se comunicaba con canciones. Los padres vieron un interés y un don en su hija, y apostaron por desarrollarlo. «Hay que tratarlos con sus dificultades pero igual que a los demás, respetando sus gustos e intereses», subraya el padre como una de las claves en la formación y el crecimiento para los menores con autismo. Creer en ellos.

Según López Raso, «quizás Paula no era tan consciente de lo que hacía, de que estaba en un escenario. Podía haber entonado mal, haberse equivocado o soltar algún comentario diciendo que no se dicen palabrotas, como hace siempre, y nosotros de pensar eso, como otros padres, podíamos haberle dicho que no subía. Pero creemos en ella».

Después de esta «presentación» en los escenarios, en la que el público se acercaba a ella al finalizar para darle la enhorabuena, se prepara para realizar un casting de un programa de televisión y empieza a hacer públicas sus covers y su potencia vocal. No hay barreras para Paula ni su voz, y ya lo ha visto Pablo López.