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Una historia digna de Pixar: el emocionante viaje de las tortugas del Acuario de Sevilla

Un viaje único por el Acuario de Sevilla para conocer la historia de los animales que allí habitan y el trabajo de conservación y cuidado de este equipo de profesionales

 

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Podría ser perfectamente la historia de una película de Pixar: estamos en una playa y es de noche. Concretamente, en el anochecer del 3 al 4 de agosto de 2020. «Los Boliches», una playa de Fuengirola (Málaga), es el lugar escogido para la llegada de una tortuga hembra Caretta caretta. A las tortugas de esta especie se les conoce como «tortugas bobas», pero de tontas no tienen ni un pelo: son, simplemente, vulnerables.

 

En esta noche veraniega, la playa malagueña de «Los Boliches», situada en la parte más occidental del Mediterráneo, el Mar Alborán, recibe un regalo muy especial e inusitado para estos lares: 72 huevos de tortuga Caretta caretta. Irónicamente, asegurar su supervivencia depende ahora de los humanos, los mismos que «amenazan» su entorno natural.

 

 

 

Concretamente, su supervivencia dependerá de técnicos y cuidadores como los que trabajan en el Acuario de Sevilla, que desde el pasado mes de septiembre alberga un total de 44 crías de esta especie. Y aunque no sea una película de Pixar, desde el Acuario de Sevilla buscan el mismo objetivo: un final feliz. «Estos ejemplares proceden de diferentes áreas de las costas españolas, pero tienen un nexo de unión: la firme voluntad del acuario de proteger a los animales, conservar la biodiversidad y trabajar por el mar», explica explica Mar Pareja, responsable de comunicación del Acuario de Sevilla. 

 

En estos momentos estas crías de tortuga se encuentran en perfecto estado de salud bajo la supervisión diaria del equipo técnico del Acuario de Sevilla, con la ayuda temporal de los biólogos de la Fundación Azul Marino. 15 de ellas ya pueden verse en el tanque de recuperación del acuario, donde pasarán los próximos meses «completando su crecimiento y fortaleciéndose  en un entorno más fiel al medio natural».

 

 


Más que un acuario: conservación y mantenimiento de la biodiversidad


 

«En general, es un centro que va más allá del ocio. Queremos que la gente conozca lo que se hace aquí y el valor fundamental en el que basamos nuestro trabajo: la conservación. La conservación del medio marino y, en este caso, nuestro proyecto principal, las tortugas», afirma Rocío Alcázar, gerente del Acuario de Sevilla. «Esta es una ciudad rica en monumentos, ocio, restauración, gastronomía… pero también tiene un acuario. Es muy raro encontrar una ciudad de interior, que no tenga mar, con un centro como éste».

 

 

 

Actualmente, la conservación de estas tortugas es uno de los proyectos más importantes para el acuario. «No solamente la llevamos a cabo en nuestras instalaciones sino que también queremos que el público que nos visita sepa cuáles son nuestros cimientos, cuidar de la biodiversidad del planeta, no sólo de la marina, sino del medio natural en general», señala Susana Montero, responsable del Proyecto de Tortugas Marinas. «Están seriamente amenazadas en la naturaleza y nosotros nos involucramos para que la supervivencia en el medio natural sea más elevada», añade.

 

Desde el Acuario de Sevilla trabajan desde dos enfoques distintos con estas tortugas: el primero, con los adultos.  «Con ellos hacemos un proceso de maduración, en un medio controlado como es el acuario, para que en un futuro puedan poner huevos y trasladarlos a una playa con la finalidad de que vuelvan y regresen al mar».

 

 

El segundo, denominado como «head starting», enfocado a la cría y maduración de los recién nacidos. «Consiste, básicamente, en ayudar a esta especie, por todas las amenazas que reciben en el medio marino ––casi todas causadas por el ser humano––. Ayudamos a los recién nacidos hasta que alcanzan un tamaño óptimo que asegura un porcentaje muy elevado de supervivencia en el medio marino».

 


Cuidando, conociendo y descubriendo a las tortugas


 

El trabajo que realizan en el Acuario de Sevilla busca ante todo dar la mayor calidad de vida a los animales. «Un proceso que es sencillo y, a la vez, complejo», asegura Alberto Cacabelos, jefe de acuaristas. «Nuestro trabajo se basa en saber qué hace un animal en la vida natural. En asegurar la calidad del agua, el ambiente, el ecosistema, que tenga una buena alimentación. Lo más importante, realmente, es no interactuar mucho con ellos. Es muy importante».

 

Según explica Alberto, «la relación [con los animales] intentamos que sea la mínima. Indirectamente los tenemos a todos controlados por especie, hay un especialista por cada tipo de animal, pero intentamos tener la mínima relación directa con ellos».

 

Eso no quita que, desde la distancia y con los medios que ofrecen desde el Acuario de Sevilla, no se pueda conocer de forma más cercana (y exhaustiva) a estos animales. No esperes a la película: visita el Acuario de Sevilla y conoce de primera mano el emocionante viaje y la historia que hay detrás de estas tortugas y cómo trabajan para prepararlas para su próxima aventura: la vuelta a su entorno natural.

 


Para más información visita acuariosevilla.es


 

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Este contenido ha sido desarrollado por Content Studio, la unidad de contenidos de Abc de Sevilla . En su elaboración no ha intervenido la redacción de este medio