El comienzo de año suele ser sinónimo de buenos propósitos y promesas de cambio que deben comenzar por un cambio de actitud. Y ese cambio bien puede venir motivado por un buen corte de pelo, porque no hay nada más transformador que un nuevo peinado.
Tanto si buscas un corte de pelo no demasiado radical como si te decantas por una actualización completa de tu look, ten en cuenta que la clave está en el estilo con el que lo lleves. Una raya al lado, unas ondas deshechas o un poco de textura pueden convertir tu corte de pelo en un acierto absoluto.
Aquí tienes seis maneras de lucir el pelo corto en 2019 siguiendo las tendencias:
«Blunt bob»
El pelo corto en 2019 tiene aire francés y se sitúa entre la oreja y la barbilla, con un ángulo ligeramente inclinado hacia adelante. Es un corte sofisticado, cómodo y de fácil mantenimiento. Y, si te arrepientes, se convertirá en una melena midi en muy pocos meses.
«Pixie» largo o «garçon»
Supone una transición entre el corte «pixie» radical y las melenas cortas tipo «bob», con un claro aire sofisticado, a lo «garçon». Se trata de un estilo que suele llevarse con la raya al lado y que permite jugar con peinados a través del flequillo, el tupé o los mechones delanteros. Por tanto, es ideal para compensar rostros alargados, cubriendo la frente.
Por tanto, da mucho más juego que el «pixie» tradicional y se convierte en un corte de pelo muy versátil, ideal para lucir en el día a día, con looks casuales, pero también con estilismo especiales en eventos.
«Micropixie»
La versión más extrema del pelo corto (antes de llegar al rapado completo) es este «pixie» que se caracteriza por despejar la frente. Se trata de un corte de pelo muy cómodo, ya que no requiere peinado y que suele lucir mejor con un toque de decoloración. Se lleva con la raya a un lado y favorece especialmente a las caras redondeadas, ya que alarga visualmente el rostro gracias a la frente despejada.
Bob clásico (recto)
Como ya habrás adivinado, cualquier tipo de «bob» será ideal como opción de pelo corto en 2019. El clásico en concreto, sigue siendo una opción actual que combina tendencia y comodidad. Hablamos de un corte a la altura de la mandíbula, idóneo para cabellos lisos y rostros angulosos, ya que dulcifica las facciones. Además, puede encajar en cualquier forma de rostro:
- Rostros alargados: mejor buscar un bob con volumen a los lados, desfilando las capas internas de la melena. Favorecerá más si llevamos la raya al lado, dejando un poco de pelo sobre la frente.
- Rostros anchos: evitar el volumen lateral en el corte para alargar la cara.
Además, es un corte que permite lucir tanto raya al medio como a un lado y que, para las ocasiones especiales podemos variar con unas ondas semimarcadas.
Bob casual
Se trata de un corte bob al que se le da textura a base de ondas deshechas y una raya al lado poco definida. Se trata de un tipo de pelo corto ideal para caras delgadas y alargadas que necesiten compensar sus rasgos. Además, permite conseguir más volumen desfilando las puntas y alargando ligeramente los mechones delanteros.
«Shag» corto
Quizá por la influencia de los looks setenteros que se recuperan ahora en el cine y las series de televisión este de corte de pelo estilo «shag» ha vuelto a las pasarelas y los editoriales y, de ahí, a la calle. Se consigue con un desfilado a conciencia de la melena que busque ese efecto «greñas» que resulta tan favorecedor y sofisticado. Puedes lucirlo con un flequillo tipo cortina (con raya en medio, con flequillo largo y corto, o incluso sin flequillo (igualando los mechones delanteros).
Si buscas inspiración, Alexa Chung es sin duda la reina del «shag» moderno.