Cualquiera sabe que la mejor forma de ocultar unas raíces llenas de canas es pasando por la peluquería o, en su defecto, con una buena sesión de tinte en casa. Pero, ¿qué ocurre cuando nos surge un plan o una cita importante y no tenemos tiempo de arreglar nuestro pelo? ¿O cuándo se nos complica el día y no podemos ir a la peluquería?
Pues parece que, una vez más, el I+D+I en el campo de la belleza parece haber hallado la respuesta para beneficio de los afectados y de sus inventores, por supuesto. Se trata del tinte temporal, en el más estricto significado de la palabra, puesto que su duración se prolonga únicamente hasta el próximo lavado.
Por internet los encontrarás en diferentes formatos:
- En versión rotulador, como es el caso de los rotuladores de la marca Touchback, que ya se comercializan en España en una amplia gama de tonos. Permiten una aplicación sencilla, con una fórmula sin amoníacos ni peróxidos que promete resistir incluso a la lluvia. Se aplica en menos de dos minutos y tarda en secarse solo uno, pudiéndose peinar el cabello a continuación con toda normalidad. Tienen incluso una versión para barbas, cejas y bigotes.
- Formato pincel: es el caso de los Root Vanish de la firma japonesa Kiwabi, que incorporan un dosificador en la base que va suministrando el tinte en el pincel en función de la necesidad. Se trata de un tinte ligero con un resultado muy natural.
- En formato compacto, como el Root Touch Up de Madison Reed, a modo de polvos que se aplican con una brocha, como si de una sombra de ojos se tratase. En este caso también es un tinte temporal que resiste al agua e incluso a la almohada y solo se retira al lavar con champú el cabello. Disponible en siete tonos, su fórmula no contiene parabenos, ni sulfatos.
Así que ya no tienes excusa para lucir unas raíces con canas en las ocasiones especiales. La peluquería puede esperar mientras tengas a mano uno de estos tintes temporales. ¿Tendrá éxito entre nuestro país? Prometedor, al menos, sí que parece…