Una llamada inesperada de Carlos Mení y Javi Aguilera que terminó en llanto
El humor y la improvisación a veces pueden generar situaciones tan inesperadas como divertidas, y si no que se lo digan a Anabel Pantoja. La influencer vivía una noche tranquila hasta que recibió una llamada de su primo, Kiko Rivera, que terminó por hacerle saltar las lágrimas. Lo que ella no sabía es que todo formaba parte de una broma organizada por dos humoristas gaditanos que han revolucionado el mundo del entretenimiento con su creatividad.
Una llamada de emergencia que se volvió caótica
Anabel Pantoja compartió en sus redes sociales su angustia tras recibir una llamada inesperada de Kiko Rivera. “Domingo noche, me llama este señor para decirme que tiene un problema en la carretera. A mí casi me da algo pensando que le había pasado algo, y después el policía hablándome cosas extrañas“, relataba en su cuenta de Instagram.
Anabel no entendía nada de lo que sucedía, pues en la llamada también participó un supuesto agente de la ley que le hablaba con frases extrañas y sin sentido. La influencer, preocupada, no pudo contener las lágrimas hasta que su pareja, David, intervino para calmarla y explicarle que posiblemente todo se trataba de una broma.
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Javi Aguilera y Carlos Mení, los reyes de la improvisación
Detrás de la famosa broma estaban Javi Aguilera y Carlos Mení, dos humoristas gaditanos que han triunfado en toda España con su espectáculo de comedia e improvisación. Con una carrera que se originó en el carnaval de Cádiz, han convertido sus actuaciones en una referencia en el mundo del entretenimiento. Sus espectáculos tienen muchos momentos épicos, pero lo que el público más espera es la famosa “llamada”.
Antes de realizar la llamada, el público sugieren palabras al azar, y los presentadores deben mantener una conversación telefónica introduciendo esas palabras de forma natural. Esta habilidad para la improvisación ha sido clave para su éxito y reconocimiento en el mundo del humor.
Kiko Rivera, la clave para la broma perfecta
Durante su actuación en Sevilla, Aguilera y Mení invitaron a Kiko Rivera al escenario para realizar la famosa llamada. Le dieron varias opciones sobre a quién llamar: su hermana, su gestor de la herencia, su contacto en Hacienda o su prima Anabel. Sin dudarlo, Kiko eligió a Anabel Pantoja.
Con la excusa de que unos policías lo habían detenido, Kiko inició la conversación y luego Javi Aguilera tomó el control haciéndose pasar por un agente de la ley. La situación se volvió cada vez más absurda y confusa para Anabel, quien, al no entender lo que ocurría, terminó llorando.
Afortunadamente, la intervención de David aclaró la situación y evitó un susto mayor. Tras descubrir la verdad, Anabel y Kiko se lo tomaron con humor y compartieron el momento en sus redes sociales.
