La modelo vuelve a ponerse manos a la obra para cultivar su huerto en la Sierra de Aracena
Laura Sánchez es una enamorada de la vida rural. La modelo onubense disfruta en su casa en la sierra de Aracena (Huelva) cuidando de su huerto y viviendo de todo lo que le aporta la propia naturaleza, como ella bien muestra en sus redes sociales: tomates, cebollas, queso que hace con sus propias manos, pepinos, calabacines, pimientos, berenjenas, huevos de sus propias gallinas… En los días que no acude a un evento especial o a alguna pasarela para desfilar, se pone el mono de trabajo y se pone a arar sus tierras.
La modelo considera su vida en el campo como un paraíso que le da paz y armonía. Como ella misma cuenta: «El campo no entiende ni de días ni de horas ni de fines de semana, venga vamos regar», mientras se pone a ello desde bien temprano. Sánchez disfruta regando, recogiendo hortalizas, arreglando la tierra para el arado, arrancando hierbas malas y matas viejas… Una vida tranquila rodeada de naturaleza y trabajando el campo.
Hace unos días la modelo sembró acelgas, remolacha, lechugas y zanahorias en su huerto mientras señalaba que «el trabajo dignifica y cansa». A la vez mostraba sus manos tras arar la tierra, ocho surcos: «Así quería yo mostrar mi huerta, el trabajo del campo es muy duro, pero con paciencia, con buena actitud, haciéndolo porque uno quiere. Es maravilloso, esto es un regalo».
