Si sueles probar el tono de las bases de maquillaje en el dorso de la muñeca te equivocas. Incluso si lo haces directamente en la cara, sobre los pómulos o la nariz, también. Lo ideal para encontrar un tono de maquillaje que se funda a la perfección con nuestra tez es probar el producto sobre la mandíbula, donde la piel no está tan bronceada como en los pómulos o la nariz (áreas más expuestas al sol), ni tan pálida como en las muñecas.