El verano es mar y de ahí nace la eterna tendencia de los diseños navy. El juego de los colores rojo, azul y blanco, junto a las rayas, sogas y accesorios dorados inconfundibles, están inspirados en los trajes de marineros y es extrapolable a todo tipo de prendas, entre ellas los vestidos. Prenda esencial en el guardarropa estival.