El embrujo de la noche de Sevilla
La capital de Andalucía guarda rincones monumentales en sus calles y plazas que cobran otra dimensión con la luz artificial
La plaza de la Virgen de los Reyes con la Giralda iluminada
- JUAN FLORES
Están clavadas tres cruces... en el barrio de Santa Cruz
- JUAN FLORES
Triana, vista desde Sevilla, con el muelle de la Sal en primer plano
- JUAN FLORES
La plaza de San Francisco cubierta aún por la vela del verano
- JUAN FLORES
La iglesia del Salvador y el arranque de la Cuesta del Rosario
- JUAN FLORES
La plaza del Salvador, lugar de encuentro habitual
- JUAN FLORES
La plaza de la Encarnación con las Setas de Jürgen Mayer
- JUAN FLORES
Escaparates de la Campana, en el inicio de la calle Sierpes
- JUAN FLORES
Monumento al sevillano Luis Daoiz, héroe del Dos de Mayo
- JUAN FLORES
Hojas caídas de los plátanos de Indias de la plaza de San Lorenzo
- JUAN FLORES
Velázquez vigila desde su pedestal la plaza del Duque de la Victoria
- JUAN FLORES
La fachada del palacio de los Marqueses de la Algaba, en la Macarena
- JUAN FLORES
La Alameda, con Hércules y Julio César encaramados a las columnas
- JUAN FLORES
Monumento a Juan de Mesa, el hombre que talló al Gran Poder
- JUAN FLORES
La fuente en el lateral del convento de Santa Isabel
- JUAN FLORES
El lienzo de la muralla almohade alrededor del barrio de la Macarena
- JUAN FLORES
Arco y basílica de una devoción universal: la Esperanza Macarena
- JUAN FLORES
El ciprés asoma por encima de la tapia del convento de Santa Paula
- JUAN FLORES
Tráfico rodado en la avenida de la Borbolla
- JUAN FLORES
