Grecia ha lanzado una nueva emision de bonos a siete anos, para conseguir cinco mil millones de euros. La fecha de vencimiento de estos bonos es el 20 de abril del 2017. La Agencia Griega de Gestión de Deuda Publica dirigida por Petros Cristodulu ha anunciado los bancos que se encargan de la emisión: los griegos Emboriki y Alpha Bank y las entidades Bank of America-Merrill Lynch, Société Générale e ING.

Originalmente se filtró en Atenas que el objetivo de la emisión era conseguir 5.000 millones de euros pero si las condiciones eran favorables podrían ser más, pero finalmente se ha conseguido cubrir la emisión. Sin embargo, el interés es del 5.9%, mucho más alto de lo que desearían los financieros griegos( pero inferior al de la emisión del 5 de marzo a diez años, que era de 6,25%) y el diferencial de la tasa de interés entre los bonos griegos y el equivalente alemán es de 325 puntos base. Se ha filtrado que estos bonos han sido comprados fundamentalmente por fondos de pensión europeos, compañías de seguros de vida y bancos comerciales y privados.

Se trata de la primera emisión griega después de la cumbre en Bruselas en la que los líderes de la eurozona se mostraran favorables a un plan de asistencia (más bien de rescate) a Grecia siempre que Yorgos Papandreu y su gobierno la solicitara al no poder hacer frente a su altísima deuda soberana. El país necesita para cerrar este año créditos por más de 50.000 millones de euros (específicamente 54.000 millones). Y a finales de mayo deberá refinanciar aproximadamente 20.000 millones de euros.

Desde que el gobierno socialista triunfó en las elecciones generales del pasado octubre, se han vendido los bonos emitidos sin problema y con suficiente demanda, pero a unas tasas de interés muy altas. Hasta esta emisión los bonos a corto y largo plazo eran altos. El diferencial de la tasa de interés entre los bonos griegos a 10 años y el equivalente alemán ayer lunes estaba en 308 puntos base (el jueves antes del acuerdo de los líderes de la eurozona para un posible rescate de la economía griega estaban a 330, y el viernes después de dicha decisión estaba en 305) .

La venta de los bonos emitidos hoy demuestra que el gobierno ha vuelto a conseguir lo que quería esta vez, aunque a un alto precio, mientras que los mercados internacionales no están convencidos del todo de la seriedad de las medidas del programa socialista para recortar drásticamente los gastos del sector público. Y no parece que la posibilidad de un plan de asistencia formado por préstamos bilaterales provenientes de países de la eurozona y financiación del FMI en caso de enfrentarse a la quiebra haya tranquilizado del todo a los inversores.