ACOJER celebra una semana cultural para concienciar sobre la prevención y tratamiento de la ludopatía
La Asociación Cordobesa de Jugadores en Rehabilitación (ACOJER) celebra una semana cultural de concienciación sobre la prevención y tratamiento de la ludopatía, coincidiendo con la celebración del Día sin Juego de Azar el 29 de octubre.
Esta entidad, que nació en 1988 y ha sido pionera en Andalucía y España en combatir esta problemática, ha preparado un programa con el que quiere poner el foco en las conductas adictivas, el perfil cada vez más joven en las personas adictas y la forma en que se puede colaborar para combatir la ludopatía.
Los actos comenzarán con una inauguración en la tarde de hoy y a continuación una conferencia a cargo del Inspector del Cuerpo Nacional de Policía, Antonio Valdivia, sobre. «Pedófilos, inocencia robada».
Al día siguiente, con motivo de la celebración del Día sin Juego de Azar, la asociación estará presente mediante mesas informativas en diferentes ubicaciones para dar información a los ciudadanos sobre la problemática existente en la ciudad como consecuencia de la dependencia al juego de azar.
También en el martes 29, en la sede de ACOJER se ofrecerá alas 19:30 horas la conferencia «De la codependencia a la autoresponsabilidad» por la psicóloga Johanna Alaminos. En el mismo horario el miércoles, hablará la neuropsicóloga Cristina Conde sobre «Cerebro y conductas adictivas», y el jueves será el turno de la Junta Directiva de la asociación para clausurar este ciclo informativo.
A principios del presente año, ACOJER ya denunció la situación de la ciudad en torno a los salones de juego, con una bajada en la edad media del jugador que pasaba de los 45 - 50 años en 1988 a los 25 -30 de la actualidad. Además, según apuntó el presidente de ACOJER, Salvador Secilla, en 2018 se abrieron 19 salas en Córdoba acompañadas de campañas de publicidad sin filtro.
La asociación, con más de tres décadas de funcionamiento, trabaja con unas 300 familias durante el año y su principal reivindicación es la vulnerabilidad de los ciudadanos ante los impactos publicitarios que incitan al juego y la facilidad para acceder a salas recreativas.