La inclusión laboral de personas con discapacidad en alza: Córdoba supera los 1.800 contratos en 2019
La inclusión laboral de personas con discapacidad aumenta cada año. Prueba de ello son el número de contratos realizados a este colectivo, que en Córdoba alcanzó los 1830 durante 2019. Andalucía, en conjunto, cerró el año con 22.148 contratos a personas con discapacidad, «la mayor cifra de toda la serie histórica» en la comunidad autónoma, según la Fundación Adecco.
En este mismo sentido, también a nivel nacional el año pasado concluyó con la «cifra récord» en contratación de personas con discapacidad en toda España, llegando a un total de 117.818 contratos, anotando con ello el séptimo año consecutivo de incremento en su empleo.
El director general de la Fundación Adecco, Francisco Mesonero, ha destacado en un comunicado que «continúa la tendencia alcista iniciada en 2012, con datos positivos que son reflejo de un mercado laboral más inclusivo, en el que se consolida la voluntad de las empresas, no sólo de cumplir con una ley, sino de generar entornos diversos como sinónimo de competitividad».
Por provincias, Sevilla lideró en Andalucía el número de estos contratos, con 7.211, por delante de Málaga (4.294), Cádiz (2.619) y Jaén (2.290). Por detrás de estas cuatro provincias se encontraban Córdoba (1.830), Granada (1.515), Almería (1.420) y Huelva, donde menos contratos a personas con discapacidad se contabilizaron en 2019, un total de 969.
Según Mesonero, «se trata sin duda de una cifra a celebrar, que aleja a las personas con discapacidad de estigmas tan arraigados como la inactividad y la dependencia», si bien ha apostillado que «ha llegado el momento de dar un paso más» y «tomar más en serio el concepto de 'Diversidad e Inclusión' como aliado para la sostenibilidad y para reducir la desigualdad social".
Centros Especiales de Empleo
Desde esta fundación advierten de que, «a pesar del avance en la contratación, la modalidad predominante de contratación es el Centro Especial de Empleo, es decir, entornos protegidos formados por un 70% de trabajadores con discapacidad, como mínimo, y diseñados específicamente para las personas con discapacidad».
Explican que, aunque «la legislación establece que los Centros Especiales de Empleo han de constituir, siempre que sea posible, un trampolín hacia la empresa ordinaria, aquella en la que la persona con discapacidad desempeña un puesto de trabajo en un entorno convencional en el que aportan su talento y competencias como cualquier otro profesional, a día de hoy, esta modalidad se está convirtiendo en un fin, en lugar de constituir un medio».
De hecho, en Andalucía «un 76% de los contratos firmados por personas con discapacidad en 2019 tuvieron lugar en el ámbito protegido», según la Fundación Adecco, para cuyo director general, «las cifras reflejan que los CEE, un sistema de protección necesario y transitorio, constituyen en la práctica en una medida finalista».
Francisco Mesonero defiende que «es en la empresa ordinaria donde el concepto inclusión alcanza su plena coherencia, pasando la discapacidad a un segundo plano y prevaleciendo el talento y las competencias profesionales».