Con destellos cobrizos, avellana, rosados, dorados,... El bronde está dando mucho juego y permite un sinfín de posibilidades para encontrar un tono favorecedor y natural. Y tú, ¿sigues siendo rubia, a secas?
«Más sexy que una rubia, más picante que una morena» ha sido el lema de L’oreal para hacer llegar a todos los rincones del mundo la coloración de cabello con más éxito de 2015 (y, todo indica, que de 2016): el bronde. Como ya te contamos, el bronde es ese color de pelo que mezcla destellos rubios con castaños en perfectas combinaciones que pueden oscilar bien hacia el dorado, bien hacia el caramelo más oscuro. Por tanto, no es una coloración que venga enlatada como tal, sino un tono que deben construirte de forma personalizada en la peluquería para que se adapte a tu tono de piel y simule ser lo más natural posible.
Para las rubias, una forma de aliviar el exigente mantenimiento que requiere una coloración nórdica o unas mechas y una manera de parecer más naturales y alejarse de los tonos oxigenados. Para las morenas, un toque de luz fácil de mantener a base de sutiles reflejos imperfectos en puntos estudiados de la melena, especialmente en el contorno del óvalo facial.
Pero la cuestión es que el bronde ha causado tal sensación que ha ido derivando en otras combinaciones con tonos que encajan a la perfección con esa mezcla de «blonde» y «brunette». De ahí se desprenden una gama infinita de coloraciones bronde que hemos intentado recopilar en esta clasificación de tipos de bronde:
- «Copper» bronde (bronde cobrizo): se consigue mezclando los tonos caramelo y castaño de la coloración bronde con destellos rubios cobrizos que encienden la melena. El resultado es un cobrizo multitono sutil que en función de la luz se asemeja más aun tono o a otro. Favorece tanto a pieles frías como cálidas y es una buena salida si estás cansada del rubio pero no te convence oscurecerte el pelo.
- Hazelnut bronde: el bronde avellana tiene como base principal ese bonito color castaño con reflejos dorados o ceniza en el contorno del rostro y en las puntas. Le favorece especialmente a las pieles bronceadas.
- Gold bronde: es el bronde en el que predomina el color rubio dorado sobre unas raíces dos o tres tonos más oscuras. Es, en realidad, una manera de naturalizar este tipo de rubio. Se puede conseguir combinando mechas doradas con otras castañas avellana.
- Rose Gold bronde (o strawberry bronde): igual que el «pink blonde» se ha convertido en tendencia, hay una versión del bronde que mezcla reflejos rosas con dorados para dar un toque rebelde e iluminar de una manera diferente el rostro. Solo para intrépidas…
- Gray bronde o ceniza («ashy»): es un tipo de bronde que se consigue con un rubio oscuro de base (o castaño claro) y unos mechones color rubio ceniza (o un degradado). La sensación es de rubio, pero con matices que lo convierten en muy natural. También se consigue con una base castaña y mechas de balayage color ceniza, que se intensifican en las puntas. Por tanto, ideal tanto para cabellos rubio oscuro como para morenos.
