Más de 50 aspirantes se sometieron a la prueba y entrevista de los expertos de este programa de Televisión Española
El éxito de talent shows como Masterchef y La Voz en la televisión de nuestro país nos hace dejar de sorprendernos ante nuevas propuestas como «Maestros de la Costura». En este formato de éxito a nivel europeo se busca al mejor modista amateur de España y han sido más de 10.000 personas las que se han inscrito para poder participar en los castings. El pasado lunes se celebró en Sevilla, tras pasar por Barcelona y Valencia, y reunió a más de 50 personas que ya habían pasado una primera criba realizada por el equipo de producción de Shine Iberia. Solo queda un casting más, el de Madrid.
En el Hotel NH Viapol esperaban desde antes de las nueve de la mañana a que los organizadores llegaran con las instrucciones de cómo sería el proceso. Nervios e ilusión entre los aspirantes donde no encontramos un perfil único: hombres, mujeres, jóvenes, edades medias y avanzadas, con estudios específicos, autodidactas, con otros empleos o enfocados al mundo del diseño… Bulevar Sur no quiere perder la oportunidad de conocerles en persona, de vivir el proceso con ellos.
Estefanía Calonge es una de las primeras que vemos. Es una chica joven, sonríe nerviosa y se presta a contarnos su historia. Viene de Santander donde ha estudiado diseño de moda y ve el programa «Maestros de la Costura» como una plataforma para darse a conocer. Trae una prenda que realizó como parte de su trabajo de fin de carrera y para la que consiguió la colaboración de un artista al que admira.
Nos explican los organizadores (de Shine Iberia, responsables de los éxitos de Masterchef) que todos han respondido a través del correo electrónico a un test con muchas preguntas, han enviado fotos y hasta un vídeo, todo ello para conseguir seleccionar a los mejores para el casting de Andalucía. Algunos se pusieron en contacto con el programa gracias a la publicidad que se ha dado del mismo en televisión y medios de comunicación, a otros les contactaron de forma directa los de la productora que también han buscado posibles concursantes en cursos de costura, patronaje, etc. Al ser una primera edición no es fácil llegar a todo el mundo.
«En España es donde más se cose de Europa, el número de inscripciones ha sobrepasado nuestras expectativas. En la edición de Reino Unido cuando más han tenido han sido 3000 y van por su cuarta edición, aquí para la primera se han presentado más de 10.000», explica Esther González, directora de casting. «El objetivo es poner en valor algo tan específico como es la costura y hacerlo a lo grande en un programa que tenga moda, glamour, grandes diseñadores, artesanía…», continúa diciendo ante la atenta mirada de los aspirantes a entrar en ese programa que ella describe con pasión y que para ellos es una verdadera oportunidad laboral.
«No pensábamos que la costura fuera algo tan masivo, Andalucía en general nos ha sorprendido también mucho por la calidad de los trabajos y lo que nos aporta es esa asociación al folclore desde la Semana Santa con los bordados de forma altruista hasta todo lo relacionado con la moda flamenca, los bordados de los mantones… Hay muchísima tradición, sobre todo lo hemos visto aquí, y por eso nos ha costado mucho hacer la preselección», responde la directora.

«Veo mucho volante, me siento como en la Feria de Abril», bromea la directora de casting. Pero no es la moda flamenca lo único que destaca entre las prendas de los aspirantes de «Maestros de la Costura» en Sevilla. También encontramos prendas de moda infantil, trajes de noche, conjuntos de prêt-à-porter, alguna bata de cola, el terno bordado de una virgen, una colección de Barbies que emulan los looks de Lady Gaga, un corsé, un chaleco masculino…
La mecánica del casting es una primera prueba por la mañana en la que presentan a los expertos del programa una prenda confeccionada por ellos mismos y que será evaluada de forma visual y a través de unas preguntas sobre su creación. Esa nota servirá para seleccionar a los que pasan a una segunda fase, por la tarde, en la que tendrán que confeccionar allí mismo y en solo una hora una prenda para la que traen todos su propio tejido y además pasarán por una entrevista personal. Al final del día se conocerán los nombres de lo que han pasado de fase, eso les llevará un poco más cerca de la fase final. Estarán a solo dos pasos de ser uno de los 12 concursantes de la primera edición de «Maestros de la Costura».
Antes de que comiencen las valoraciones paseamos por las mesas viendo lo que mejor saben hacer estos modistas amateur. Mateo viene desde La Carolina (Jaén) y trae consigo el terno de la Virgen de Valdepeñas, es bordador y peluquero. «Desde los 16 años bordo para temas religiosos, pero ahora quiero crecer y aprender más de costura y en este programa creo que me iría bien», nos cuenta.
En los concursantes buscan talento, creatividad y destreza que puedan desarrollar durante el concurso
Es imposible no parar junto a las Barbies de Benita y Alfonso, que vienen de Tomares. El resto de aspirantes tampoco puede evitar admirar la labor de esta madre e hijo. Su madre le regaló una Lady Gaga en miniatura, copiando cada uno de los elementos del look de la artista, que había sido objeto de investigación de su hijo en la Universidad. Se presentan juntos, Benita es tímida, al contrario que Alfonso que no duda en contarnos la historia de su colección de más de 110 Lady Gagas. Benita cose desde pequeña, aprendió sola y siempre lo ha hecho como un hobby. ¿Y si entra solo usted? «Me las apañaré», responde. «Lady Gaga conoció nuestras muñecas por Twitter y tiene cinco de ellas, hasta nos invitó a un concierto y nos subió al escenario», recuerda Alfonso. Cada una de estas muñecas tiene un valor incalculable, no solo por las horas de trabajo invertido, la búsqueda de materiales, las dificultades… también a nivel personal porque se han convertido en el tiempo de valor que comparten madre-hijo.
Seguimos paseando entre los aspirantes y nos encontramos con Javier, tiene 26 años y es de Sevilla. De forma autodidacta ha confeccionado su primera prenda, nada más y nada menos que un traje de flamenca que lució su madre en la pasada Feria de Abril. Con él se presenta a este casting y con la ilusión de no trabajar más en un supermercado y convertirse en modista. «Espero aprender mucho, yo me atrevo con todo y creo que con este traje pueden ver mis posibilidades», cuenta a Bulevar Sur.
«También buscamos cierta técnica que se puede adquirir durante el programa también teniendo un poco de base. Le buscamos para que cumpla el sueño de convertirse en profesional siendo amateur», dice la directora de casting. TVE apoya la idea de este programa porque la industria textil española es una de las más importantes del país, tiene un modelo avalado y rentable así como en constante crecimiento y es copiado por otros países, eso se basa en talentos creadores y de los negocios. «La moda es una de las industrias a potenciar, como el turismo y la gastronomía, poner en valor también los oficios artesanos relacionados con el textil que le dan grandeza es muy importante», añade. Es una idea romántica, cree la directora, pero son factores que forman parte del «ADN español».
Entre todos los que vemos en esta sala de casting una cara nos resulta familiar, es Diego Recamales, uno de los diseñadores jóvenes que ha destacado en los últimos años en la ciudad. El ganador del certamen Novia del Sur en 2015 se presenta con un vestido de terciopelo estampado que considera una de sus mejores cartas de presentación. «Yo tengo ese poquito de arte que creo que vendría muy bien al programa, también muchas ganas y creo que el vestido que traigo muestra lo que puedo llegar a hacer», nos responde, resuelto. También entre los participantes está la que en el mismo certamen recibió la mención especial, Lucía Roca, que viene desde Madrid donde ha realizado prácticas con el diseñador Leandro Cano.
Estas son solo algunas de las historias que se esconden tras las puntadas, los bocetos, los patrones… Solo serán 12 los elegidos que podrán demostrar ante la audiencia, de la que se espera un caluroso respaldo, su talento, creatividad, destreza y ganas.