Cuando llegamos a casa o justo antes de dormir lo habitual es quitarnos el sujetador. Ese momento de libertad y comodidad absoluta para la mujer y sus pechos tras un día entero de sujeción. Las que usan sujetadores con aros habitualmente tienen claro el motivo: es incómodo y hasta doloroso. De todos modos el aspecto de nuestros pechos nos preocupa. No queremos arrugas en el escote, descuelgue, estrías. ¿Qué se puede hacer? El mercado ha lanzado algunos modelos especiales de sujetadores para dormir.
Pero, ¿quién los necesitaría y por qué? Si tienes el pecho grande podrás evitar que se deteriore antes de tiempo y se descuelgue, además de ganar en comodidad al moverte, dormir de lado (o como quieras), etc. Hay mujeres que durante el periodo sufren de sensibilidad extrema en el pecho y este tipo de sujetadores las alivia. Y por último, aunque tengas poco pecho, si tu postura de dormir es de lado y quieres evitar posibles estrías o que se caiga el pecho que cuelga conseguirás los mismos beneficios.
Cómo debe ser el sujetador
Las claves de un buen sujetador para dormir es que sea extremadamente cómodo, con las menos costuras posibles, con un mismo tejido (no tirantes de gomas) y si tiene cierres con corchetes que sean suaves y delicados. Debe adaptarse y fundirse todo lo posible al cuerpo a la vez que sujeta el pecho.
Bulevar Sur ha entrevistado a Inmaculada Canterla, Licenciada en Farmacia, especialista en Dermocosmética, Nutrición y Dietética, y Medicina Antiaging y fundadora del Cosmeceutical Center en Sevilla. Conocemos su opinión experta sobre el cuidado de la piel del pecho mientras dormimos (y el resto del tiempo).
Dormir con sujetador
¿Está a favor o en contra?
A favor por supuesto. Imprescindibles en muchos casos.
¿Quiénes y por qué motivos deberían hacerlo? ¿Qué beneficios tendrán?
Personas con pecho que al dormir marquen las arrugas verticales en canal interpectoral en escote. El beneficio es claro y evidente: evitar y reducir las arrugas interpectorales y del escote y no tener un escote de abuela.
¿Cómo cree que deberían ser los sujetadores para dormir?
Lo ideal es que fueran cómodos, cosa que es difícil para un sujetador con el que se tiene que dormir y que tiene que llevar una almohadilla para no arrugar el “canalillo”. Con lo cual en nuestra clínica prescribimos en vez del sujetador unos parches de silicona con silicio. Sus medidas están estudiadas anatómicamente, para potenciar al máximo su efectividad en toda la zona del escote, desde la parte de debajo del pecho, pasando entre los dos pechos y hasta la base del cuello. Consigue así evitar y corregir la formación de arrugas/surcos dando libertad de movimiento mientras se duerme. Tiene una duración entre 33 y 35 días, y su uso y mantenimiento es muy fácil (solo es necesario limpiar una vez a la semana). Son autoadhesivos y sus siliconas son de alta calidad en contacto con la piel (clase 1 para el uso médico). Igualmente lo hay para la zona del cuello.
¿Cómo se debe cuidar la piel del pecho para evitar ese descuelgue, las estrías, etc del paso de los años? ¿Qué tratamientos estéticos existen y qué se puede hacer en casa?
El cómo y con qué se duerme es fundamental para el plegado de esta zona. No maltratar esta zona con el sol porque luego piel fina y adelgazada, envejecida, reseca, manchada… Haciendo ejercicios posturales para mantener la zona erguida. Tratamiento tópico con principios activos adaptados a esta zona (es decir si en el rostro pongo un retinol del Dr. Obagi al 1 %, en el escote lo pondré al 0.25%). Hay tratamientos especiales para esta zona según el problema.
Sujetadores para dormir
Pillow Bra
Pillow Bra se compone de una almohadilla ergonómica de espuma que encaja perfectamente entre los senos, rellenando el vacío que se genera en la zona interpectoral. Envolviendo la almohadilla central en forma de top se incorporan dos copas sin aros que cubren totalmente los pechos. Pillow Bra sólo incorpora materiales antialérgicos y en su fabricación se han reducido al máximo las costuras, eliminando así las molestias tan frecuentes en el uso de otros sujetadores. Su objetivo es evitar y retrasar los senos caídos, las arrugas en el escote y ofrecer descanso, confort y sujeción total.
Softstrecht preformado de Chantelle
Tejido ultraelástico, invisible y liviano para un movimiento sin esfuerzo y una comodidad única. El sujetador SoftStretch de Chantelle está diseñado para adaptarse, moverse y fluir con cada forma y tamaño de cuerpo. Eso le convierte en un perfecto sujetador para dormir. Está disponible en varios colores para elegir el que más te guste.
Top de Calvin Klein
Dentro de las tendencias del mundo de la moda deportiva nos encontramos con los sujetadores con bandas con las marcas y logos. Este modelo de Calvin Klein es cómodo y trendy. ¿Qué más se le puede pedir a uno con el que vayas a dormir o pasar el día en casa?
Bràssiere de Intimissimi
A este tipo de sujetadores también se les conoce como brasier. Elegimos un modelo de Intimissimi que cumple con todos los requisitos necesarios para convertirse en un sujetador ideal para el momento del descanso. Es de algodón natural, no tiene costuras ni cierres, no tiene tirantes finos que se clavan y se ajustan y adapta al cuerpo.
Bràssiere de Etam
Este modelo de Etam tiene algo más de forma para el pecho, es más femenino y menos deportivo que el anterior. Pero no por ello pierde en comodidad y sujeción. Tienen además una interesante gama de colores.
Sujetador para dormir de Marks & Spencer
La marca británica es una de las que cuenta con una mayor variedad de sujetadores, tallas, copas y formas. Piensan desde hace año en las mujeres de tallas grandes o menos habituales y también en las de tallas muy pequeñas. Una de las virtudes de su sujetador para dormir (específicamente denominado así, no ocurre con otras firmas), es su forma y su tejido.
Top sin costuras de Oysho
No te costará encontrar en Oysho y en el resto de tiendas de lencería opciones de ropa interior sin costuras (seamless en inglés). La llegada de la moda cómoda, incluso antes de la pandemia, ha revolucionado también la moda íntima. Este tipo de sujetadores que recordamos como los primeros que usamos de niñas, ahora son de los preferidos también por las adultas que no tienen mucho pecho.