Dolmen de Soto

Dólmenes de
El Pozuelo

Tejada la Vieja


El yacimiento de Tejada la Vieja ocupa una extensión de 6,5 hectáreas de un cerro amesetado entre la campiña onubense al sur y la zona minera que se extiende al Norte.
Su ocupación data desde el siglo VIII a. C. hasta el IV a. C., aunque no se descarta que estuviese ocupada con anterioridad.

Está rodeada por una muralla sin cimientos apoyada directamente sobre el cerro, y con sólo un “pie de amigo” en la base, formado por dos líneas de lajas de pizarra apoyadas verticalmente sobre la muralla.

Esta fortificación, realizada a mediados del siglo VIII a. C., no sólo tenía la función de defender la ciudad, sino también de delimitar el espacio urbano, a la vez que otorgaba prestigio y los diferenciaba claramente de los poblados indígenas que también se repartían por la zona.

Tejada la Vieja supone, además, una transformación desde el punto de vista arquitectónico, ya que en ella encontramos elementos característicos fenicios, como la habitación de planta cuadrangular realizada con zócalo de piedra y paredes de adobe, o bien sin zócalo y toda de tapial. Ese cambio se debe, principalmente, a las prolíficas relaciones comerciales que mantenían tartesios y fenicios, que convirtieron a la ciudad en una de las más prósperas de occidente.

No obstante esa influencia marcadamente oriental, Tejada la Vieja no deja de ser un asentamiento tartésico, como así lo demuestra la predominancia de la cerámica indígena frente a la realizada a torno, manteniéndose ese carácter autóctono incluso cuando se generaliza el uso de la vajilla a torno.

En definitiva, y como contraposición al modelo de poblado indígena en el que no se definían los espacios urbanos, Tejada la Vieja ofrece un plano urbanístico delimitado por calles y manzanas, como correspondía a una ciudad que requería una organización para sus relaciones comerciales.

Sin embargo, a mediados del siglo VI a. C. la ciudad empezó a sufrir una decadencia en la producción minera, que obligó a su población a iniciar un paulatino y progresivo abandono durante la primera mitad del siglo IV a. C. hacia la campiña situada al Sur, en busca de terrenos de cultivo.

DATOS DE INTERÉS

Las visitas sólo pueden realizarse en grupos y deben ser concertadas previamente con la Sección de Arqueología de la Diputación Provincial de Huelva. Tfno. 959 49 47 62

Enlaces de interés:
Página web de la Diputación de Huelva