Sao Paulo despierta con resaca. Es 12 de junio, Día Dos Namorados (Día de los novios), festivo nacional en todo el país. Anoche, la cerveza Brahma y la caipirinha, bebidas «oficiales» de Brasil, agotaron existencias. Pero, afortunadamente, hoy no hay que ir a trabajar, ni al colegio, ni a la Universidad. Hoy es feriado. Y qué feriado. 12 de junio de 2014, comienza el Mundial de fútbol, la religión con más adeptos en el país de la samba. Y, como manda la tradición, lo hace con el equipo anfitrión: Brasil, uno de los grandes favoritos del torneo junto a España (que defiende título), más Argentina y Alemania.
Los pentacampeones se miden a Croacia[Brasil-Croacia en direco, a las 22.00] y lo hacen con el apoyo unánime de su hinchada. A pesar de los pitos de los partidos preparatorios, la familia Scolari no para de crecer. Felipao sabe que la armonía entre selección y aficionados es clave para el éxito.
Ayer volvió a alentarlos, pidiéndoles su apoyo en la conferencia de prensa previa al duelo inaugural: «Somos una familia y tenemos que remar hacia el mismo lado». Dicho y hecho. Con los primeros rayos de sol de este 12 de junio, la ‘torcida’ ha comenzado a echarse a la calle ataviada con la ‘verdeamarelha’.
En cada semáforo, un vendedor ambulante con banderas gigantes de Brasil. Los coches, maqueados con bufandas, camisetas y banderines de la ‘seleçao’. Los cláxones como banda sonora. Hasta un grupo de unos 50 corredores que entrenaba esta mañana por el centro de Sao Paulo luciendo con orgullo su camiseta de la canarinha.
Es 12 de junio de 2014. ‘Día Dos Namorados’ en Brasil. Y ya se sabe que el fútbol es el único amor que nunca es infiel. Que ruede el balón.







