MADRID
La osa panda Hua Zui Ba —Boca Coloreada— por fin lo ha conseguido. Ayer parió dos crías, gracias a una inseminación artificial. Después de 135 días de gestación, alumbró al primero a las 13.40 horas y al segundo a las 15.13 horas. Las crías, cuyo sexo todavía se desconoce, pesaron unos 150 gramos cada una.
Estos nacimientos son los primeros en España desde que vino al mundo el emblemático y tierno Chu Lin, que se convirtió en la mascota del zoo hace 28 años. Tras su muerte, tuvieron que pasar 11 años para volver a ver a estos osos «blanqui-negros» en el recinto de esta institución.
Tras el parto, el comportamiento de la osa Boca Coloreada fue absolutamente normal, lamiendo a la cría para limpiarla y manteniéndola sobre su pecho, a la altura de las mamas. El segundo alumbramiento también se desarrolló con normalidad, aunque se decidió que la cría fuera trasladada a una incubadora.
De momento, los visitantes del zoo tendrán que contentarse con contemplarlas a través de las pantallas que se han colocado en la instalación de los osos pandas, ya que permanecerán aislados durante un periodo aún no definido, para asegurar la tranquilidad que madre y crías necesitan. Ambas son ciegas —algo habitual en los recién nacidos— y su color de piel es rosa. Tardan un mes en adquirir el blanco y negro característico.
La madre, Hua Zui Ba, llegó a España, junto al macho Bing Xing —Estrella de hielo—, en septiembre de 2007, tras un vuelo de 35 horas. El Gobierno de China regaló a los Reyes de España estos dos ejemplares pandas como obsequio de «buena voluntad».
Embrión congelado
Se trataba de la segunda vez que esta osa panda era inseminada con el semen de Estrella de Hielo, ya que en 2009 se sometió a un proceso similar que no llegó a buen término porque la madre sufrió una «reabsorción» del embrión antes de su implantación en el útero. Esto es algo común en el caso de las madres primerizas.
La gestación de estos animales se caracteriza porque el embrión «queda congelado en la membrana y se da una parada biológica durante un periodo inespecífico», según el director técnico del zoo, Jesús Fernández.
El nacimiento de estas crías es un gran logro a nivel mundial por cuanto se refiere a una especie en gravísimo peligro de extinción, y confirma al Zoo Aquarium de Madrid como una de las instituciones más importantes y reconocidas por su compromiso con la conservación.
Las crías permanecerán con su madre hasta los cuatro años y posteriormente serán trasladadas a la reserva de Chengdú (Sichuan, China), de donde proceden sus progenitores y viven 1.600 pandas en libertad. Así figura en el convenio suscrito por el Gobierno chino y el español.


