Siendo estudiante de Integración Social, Silvia Cabañas tiene claro que quiere ayudar con su trabajo a eliminar barreras de desigualdad. Su paso por Futuro Singular supuso para ella un cambio de mirada hacia las personas con discapacidad. Una revelación de que es posible la inclusión. «Mi idea sobre las personas con discapacidad era que necesitaban muchos apoyos, adaptarles todo, no puede hacer lo que quieras con ellos porque necesitan más atención, pero el voluntariado cambió mi forma de ver y tratar a estas personas», explica la joven.

Su colaboración con la entidad se ha centrado en la Escuela de Verano Inclusiva que llevan a cabo en verano, «para personas con y sin discapacidad». Un programa «de actividades lúdicas, deportivas y educativas donde la función del voluntariado es dar apoyo a las personas con discapacidad  en las terapias y sensibilizar las personas sin discapacidad para que ahora y en el futuro sean apoyos naturales para las personas con discapacidad».

Este es uno de los grandes retos de nuestra sociedad para lograr la inclusión: que todas las personas se sientan llamados a ayudar al que lo necesita sin que estas personas tengan que vivir una vida «adaptada». Los participantes de la Escuela Inclusiva de Verano comparten valores de respeto, apoyo, empatía y generosidad bajo el paraguas del disfrute y la diversión y conformando un espacio de inclusión para todos.

Silvia destaca de esta experiencia que lo importante es «llevar la idea de disfrutar y aprender, porque más que ellos aprenden contigo, tú aprendes con ellos». Del verano recuerda con cariño cómo a pesar de que los dos chicos a los que acompañó como voluntaria en el campamento, al principio no se mostraron «muy receptivos» con ella, al finalizar el programa su relación cambió. «Me abrazaron, me dijeron que querían verme y me invitaron su casa. Son cosas que crees que te dicen por decir pero realmente les sale de dentro porque les has aportado algo bueno en esa semana», añade la voluntaria.

Sobre Futuro Singular, la joven subraya la labor tan importante que hacen «para el bienestar de las personas con discapacidad». «Cómo enfocan el trabajo y cómo luchan por darles calidad de vida» son algunos de los aspectos que más han marcado a la joven. Y por supuesto, el refuerzo que ha experimentado sobre su vocación: «desde que entré aquí y vi como se trabajaba me hace seguir pensando que esto es lo que quiero para mi futuro», reflexiona Cabañas.