Sasha Djordjevic se quejó al final del partido por la labor arbitral durante el partido y, en particular, por una acción postrera en la que Orenga protestó amargamente una falta en ataque haciendo aspavientos que no sentaron nada bien al serbio, que terminó expulsado en ese momento.
"En primer lugar, felicito a la selección española por su triunfo, pero no acepto que no respeten a mi equipo. A falta de 40 segundos para el final, en una falta de ataque que era muy clara, Orenga se ha puesto a protestar y a hablar con los árbitros. Eso es una falta de respeto", apuntó Djordjevic en sala de prensa. [Crónica del España-Serbia del Mundial de baloncesto]
La acción, que ocurrió realmente a 52 segundos para acabar el último cuarto, es una falta en ataque de Claver que Orenga protesta ostensiblemente ante la mirada de Djordjevic, que le increpa por haberlo hecho. Orenga, le pide explicaciones entonces y el pique termina con el serbio camino de los vestuarios después de intercambiar palabras con el banquillo español y los colegiados.
"A los árbitros hay que dirigirse con respeto. Sasha no lo ha hecho así y por eso le han echado", afirmó tras el partido Orenga, que prefirió no echar más leña al fuego. "Lo único que sé es que hemos ganado el partido y lo hemos ganado bien", señaló el técnico.