Salinas y el Córdoba están inmersos en la batalla del mes de agosto. En ella, el club está en la obligación de organizar su futuro tanto en el terreno de juego como en los despachos, materias que en este caso tienen una extraña ligazón. Aprovechando la mediática presentación de Jonathan Sesma, el mandatario blanquiverde despachó públicamente ambos asuntos y desveló parte de sus planes.
Eso sí, el presidente blanquiverde, como si fuera un sello personal, insistió en su «optimismo», pese a tener muchas tareas sobre la mesa.
Además, el mandatario quiso zanjar también el asunto de la Operación Brugal (acusación al Hércules sobre la compra de partidos) concluyendo que «si judicialmente el caso está cerrado y federativamente no se va a dar ningún documento con el que abrir un expediente, no hay caso con el que continuar y por fin termina el culebrón del verano». Es decir, una tarea finiquitada.
Fichajes
Culminada la contratación de Jonathan Sesma, el club parece haber virado su plan de acción en cuanto a las incorporaciones. Hace una semana, se hablaba de dos puntas. Sin embargo, Salinas matizó ayer que «traeremos a un delantero, un jugador de banda derecha y un mediocentro».
Para llegar a esta explicación, el mandatario se escudó en que «en el transcurso de esta semana, el míster ha visto a Charles, con la velocidad y el gol que tiene, como mediapunta o punta, por lo que se lo ha transmitido a Javier Zubillaga y nos ha hecho darle la vuelta a las prioridades de fichajes». Ya su ubicación en Jaén fue todo un síntoma. Por lo tanto, el Córdoba se centrará fundamentalmente en la contratación de un jugador referencia para el ataque. En los últimos días, han sido muchos los ofrecimientos, si bien el Córdoba está mirando el dinero disponible. Evidentemente, será la apuesta de riesgo mayor.
Para completar la vanguardia, Lucas Alcaraz ha cambiado sus preferencias insistiendo en la contratación de un jugador que actúe por la banda derecha. Esta situación vuelve a poner en el disparadero a Mikel Dañobeitia. Salinas, más comedido en este caso, resaltó que «no tengo nada que decir al respecto», aunque ese silencio es significativo.
En este caso, se supone que el club no hará movimientos hasta que no se concrete el alta. Y es que en el caso de cerrar los tres fichajes en cuestión completaría una plantilla de 24 fichas más Coca. Dicho de otro modo, Dañobeitia lo tendría complicado para jugar. Además, el club sigue a la caza y captura de un mediocentro de corte defensivo. La lesión de Cabrera continúa siendo un quebradero de cabeza y la polivalencia de Alberto Aguilar como central ha inclinado a Alcaraz a solicitar otro mediocentro. Han salido nombres a la palestra, pero aún no se ha concretado ninguna operación.
De hecho, Diego Camacho, uno de los teóricos futuribles, explicó a ABC que «sé que varios equipos se han interesado por mí, pero sigo viviendo en Madrid desde que dejé el Sporting. Es más, he leído que estaba en Inglaterra, pero la verdad es que no he salido de España en este tiempo».
Salinas avanzó que los nuevos movimientos de piezas «los cerraremos de aquí al lunes en el primer caso; otro, entre el lunes y el martes; y el último al final de la otra semana, para así dejarlo completado». En definitiva, plazos que luego podrán verse alterados en función a las exigencias marcadas por el mercado.
Socios
Evidentemente, la habilidad en los fichajes marcará también la pauta entre el público general a la hora de concretar nuevas altas en la campaña de abonados. Coincidiendo casi con el cierre del plazo de renovaciones, el presidente mostró su satisfacción al entender que «estamos en unos números buenos en relación a otros sitios. Sin duda, el lugar más especial es Cádiz. Han bajado a Segunda B y en dos semanas han vendido 5.000 carnés. Mientras, en otros lugares, como Getafe, lo están sufriendo».
Actualmente, el Córdoba bordea la barrera de los 7.000 socios. Esta cifra acerca a los números de la pasada campaña. Incluso, Salinas destacó que «todavía no se han concretado una serie de convenios con instituciones y empresas».
Patrocinio
Otro de los grandes temas que faltan por concretar es el patrocinio en la camiseta. Salinas, en su línea, habló de que «tenemos muy buenas expectativas con las gestiones que estamos realizando con BBK para seguir con Cajasur».
Implícitamete, el club ya ha dado una pista, ya que en los «cool» de publicidad de la sala de prensa y la zona mixta aparece el logotipo de la entidad financiera en el grupo de firmas de primer orden.
Sobre el crédito, vital en el desarrollo financiero de la sociedad, Salinas volvió a esgrimir que «hasta octubre y noviembre no tomarán posesión, pero no dejo de ser optimista».




