VALERIO MERINO
Imagen de la construcción del Fondo Sur del estadio El Arcángel hace dos semanas
El Córdoba CF esperará el resultado de las elecciones municipales del 22 de mayo y a la conclusión del Fondo Sur de El Arcángel para negociar con el Ayuntamiento de Córdoba la cesión del estadio público. La utilización del recinto por el club se hace en precario desde hace varios años, ya que no existe ningún documento oficial que sostenga el uso de la instalación municipal por la entidad blanquiverde.
La fórmula que se utilizará para desbloquear esta situación será el arrendamiento. En principio, sólo de las zonas que vaya a utilizar la hueste cordobesista. El Córdoba está dispuesto a pagar un cánon por la cesión del estadio, pero con dos condiciones básicas. Según ha podido saber este diario, el club solicitará un cambio en el método para calcular la cuota que tendrá que abonar. Esta cuestión la considera imprescindible para abaratar al máximo el coste. Además, la sociedad anónima blanquiverde pretende que el abono de los gastos corrientes por el uso del estadio sean compartidos. Actualmente, los afronta completamente el club.
Tres motivos de parálisis
Tres han sido los motivos que han dejado aparcada la negociación y formalización de un nuevo documento para «legalizar» la cesión del estadio al Córdoba CF. Primero, el proceso de venta de la entidad. Los dirigentes paralizaron las gestiones ante la posibilidad de ceder las riendas de la SAD.
La segunda, como ya adelantó Salinas en este diario, es una cuestión legal. El fondo estatal utilizado para financiar la obra del Fondo Sur no podía acometerse con ese caudal público si la instalación estaba previamente cedida al club. El FEESL sólo puede ser destinado a bienes de titularidad pública.
En tercer lugar, el Córdoba esperará el resultado de las elecciones municipales, que se celebrarán el 22 de mayo, para negociar el acuerdo con el nuevo Gobierno municipal. A su juicio, no tendría lógica pactar un convenio ahora que luego no se firme si hay cambio de poder en Capitulares.
La fórmula que está en la mente de los dirigentes blanquiverdes para gozar del estadio es el arrendamiento. Eso sí, con importantes matices de toda índole. El Córdoba quiere que se concrete perfectamente el ámbito de la cesión. Ahora, con la nueva configuración del recinto ya no habrá un traspaso global.
Coste real y no de inversión
¿Por qué? Muy simple. El estadio ya tiene disponibles varias plantas de oficinas que serán usadas por el Ayuntamiento y por varias delegaciones de la Junta de Andalucía. Además, el «hueco» de la grada sur será aprovechado por el Consistorio para conservar material público. Además, Capitulares también tiene reservado el parking soterrado de Preferencia y garantizadas varias plazas en el palco. El Córdoba, lógicamente, entiende que todo ello debe quedar excluido de la cesión y, por tanto, de un posible abono.
Es más y, posiblemente, lo más trascendente. El club tiene previsto que se modifique la fórmula que habitualmente utiliza el Instituto Municipal de Deportes (IMD) para calcular el cánon que debe pagarse por el uso de una instalación cedida. Hasta ahora, el IMD ha usado el coste de la inversión realizada en el estadio. Es decir, el coste de las obras hasta el momento (algo más de 43 millones de euros). Sin embargo, el Córdoba considera que lo más oportuno sería hacer el cálculo en función del valor real de lo cedido (campo de césped, los graderíos, oficinas, vestuarios y parking del Fondo Norte) y no de la inversión realizada. Ésta es claramente desproporcionada respecto al valor de mercado de las instalaciones construidas, según fuentes del club.
El Córdoba estima que abarataría, con esta medida, notablemente el cánon que tendrá que abonar cuando se formalice el acuerdo. Es más, el club está plenamente convencido de que, a partir del nuevo convenio, los gastos corrientes (agua, luz, mantenimiento, etc) tendrán que ser compartidos, ya que el Consistorio y la Junta de Andalucía tendrán parte de las instalaciones y deberían colaborar en el abono.
