
RAFAEL CARMONA
Juan Ortega templa con la mano derecha al último toro de Fuente Ymbro en la tarde de ayer
La madurez se puede poseer aún siendo joven. Esto, en el mundo del toreo, es síntoma de buenos presagios. Por desgracia, la Escuela Taurina de Córdoba llevaba varios años sin sacar un valor en alza. Pero, visto lo visto ayer, parece que ahora puede haber uno.
La primera y única novillada de la Feria ha permitido retomar la ilusión a cuantos ejercen y apuestan por los jóvenes de la cantera. Las buenas sensaciones que causó en el festival a beneficio de la Asociación Española contra el Cáncer el espada Juan Ortega se han visto revalidadas en su debut con caballos. Afortunadamente, esta vez hay síntomas suficientes como para determinar que hay un futuro torero. Aunque resulte prematuro apuntarlo, lo cierto es que se le vieron maneras propias de quien ya desarrolla la profesión con más tardes que un diestro a estrenar.
En el segundo festejo del ciclo en Los Califas hubo que esperar hasta el final para presenciar algo para el recuerdo. En el último de la tarde, y tras una actuación desmedida en su primero donde pecó de encimista y no consiguió la transmisión, pese a que el novillo se dejaba, Ortega consiguió levantar los ánimos de quienes se veían abocados al aburrimiento.
Chicuelinas al paso en la lidia y quite al delantal tras la puya fueron los primeros dardos certeros del diestro. Todo con parsimonia y temple. Tras ese preámbulo, el novel inició su faena sentado en estribo para sacar a su antagonista de manera cadenciosa. Midiendo los tiempos, Ortega comenzó a construir la faena pertinente que requería el animal. Así toreó con gusto y torería con la mano derecha en series ligadas donde el temple se erigía como aliado de actitudes maduras. Más justito por el izquierdo el cornúpeta, el novillero continuó con una línea de fundamentada en la candencia y sustentada en la firmeza. La faena se retomó tras una pausa con una sexta serie de toreo al ralentí que precedió a una estocada certera para obtener una recompensa justa.
Hasta ese momento, el encierro de Fuente Ymbro, con menores opciones de las esperadas, se desarrolló con cierto aplomo.
El placeado novillero Juan del Álamo no consiguió adecuar la calidad de su primero por culpa de la mínima fuerza que poseía la res. Armonioso con la capa y firme toda la tarde, comenzó con buen son la faena de muleta, pero sin ligar. La falta de condiciones propició que fuera cogido sin consecuencias por el pitón derecho. Frente a su segundo, siempre con recursos, estuvo bullidor ante un animal sin recorrido en una faena donde el que embistió fue el torero.
Víctor Barrio se llevó el peor lote. Su primero, al que recibió en el centro del platillo de rodillas, apenas le concedió tregua por ambos pitones, mostrándose intratable ante cualquier acción que se intentara. En el segundo, al que saludó con dos largas de rodillas, tampoco pudo cuajar pese a que metía la cara con la acometividad justa. Lo bueno, como casi en todo en la vida, se hizo esperar. Pero mereció la pena.
El cartel de hoy
La Palmosilla. Divisa: Azul, celeste y roja. Señal de oreja: Orejisana. Antigüedad: 1996.
José Luis Moreno. Nacimiento: 24-11-1974 en Dos Torres, (Córdoba). Alternativa: 30-05-1996 en Córdoba, con Enrique Ponce. Confirmación: 05-04-1998, con Javier Váquez.
Alejandro Talavante. Nacimiento: 24-11-1987 en Badajoz. Alternativa: 09-06-2006 en Cehegín, (Murcia) con Morante de la Puebla. Confirmación: 08-04-2007 con El Juli.
Cayetano. Nacimiento: 13-01-1977 en Madrid. Alternativa: 09-09-2006 en Ronda, con Francisco Rivera. Confirmación: 04-06-2008, con José María Manzanares