El tráfico en el centro de la ciudad sufrirá transformaciones sustanciales a partir de los últimos días de la próxima semana, que será cuando entren en vigor las primeras modificaciones circulatorias previstas por el Consistorio para darle salida a los clientes de los aparcamientos públicos de Edaco, en Conde de Robledo, y de la calle Sevilla, que se encuentra en la última fase de sus obras de reforma. Los cambios empezarán por el Bulevar del Gran Capitán, del que en breve desaparecerá el carril provisional que lo cruza entre las calles Góngora y Menéndez y Pelayo y que se habilitó para permitir el tránsito de los vehículos provenientes del parking de Edaco una vez que finalizó la remodelación de Cruz Conde. En lugar de transitar por ahí, los coches y motos que dejen la calle Góngora se dirigirán hacia Ronda de los Tejares por El Bulevar, en el que estarán operativos en unos días dos carriles —uno por cada sentido de la circulación— en el tramo comprendido entre Conde de Robledo y Ronda de los Tejares. Además de salida, esa doble vía será de acceso a Edaco, de forma que los conductores que estén interesados en dirigirse al estacionamiento privado habrán de circular por Ronda de los Tejares, donde a la altura de las oficinas de Cajasur encontrarán un cartel electrónico que les informará de si hay plazas disponibles en el aparcamiento; en ese caso girarán a la derecha al llegar al Bulevar.
El Ayuntamiento comenzó ayer a preparar esta vía, que ya existe de hecho aunque sólo con un carril. Para que puedan pasar vehículos en las dos direcciones, el Consistorio comenzó a retirar los monolitos que separan la vía (muy transitada por peatones) de la zona del Bulevar; los postes metálicos que delimitan el paso para viandantes junto a la fachada de los edificios no se alterarán, de manera que sigan protegiendo el espacio de los peatones.
La concejala de Movilidad y Seguridad, Ana Tamayo, aseguró ayer que le consta que es posible que se crucen dos coches en sentido opuesto por los carriles del Bulevar que se van a habilitar, y precisó que los vehículos que circulen por allí lo harán a una velocidad muy baja. De otro lado, la responsable del tráfico en la ciudad indicó que Acsur, que es la empresa que realizó la remodelación de Cruz Conde, tendrá que correr con la reparación del pavimento de El Bulevar que se ha dañado con el tránsito de vehículos por el carril que lo cruzaba a la altura de San Hipólito.
La segunda batería de cambios tiene que ver con el aparcamiento de la calle Sevilla, al que el Ayuntamiento tiene que garantizarle salida ya que una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía ratificó su condición de rotatorio al 50% además de para uso para residentes. Los vehículos accederán a la calle Sevilla desde La Victoria —donde habrá un panel informativo sobre las plazas disponibles— por Concepción, Duque de Fernán Núñez y Pérez de Castro. Al llegar a Valladares ya no habrá una pilona, sino una cámara que registrará la matrícula del vehículo. En el caso de que haya sitio libre en el estacionamiento de la calle Sevilla, podrán continuar por Leopolodo de Austria hacia el parking en una zona que ya es de tránsito restringido para residentes —que podrán seguir circulando por ella—. El sistema de cámaras se completa con tres más, una de ellas ubicada en el acceso inmediato al aparcamiento y otras dos en la vía de salida de vehículos, que será Duque de Hornachuelos y Diego de León. Los vehículos que circulen por el área restringida a residentes sin que haya plazas en el parking serán multados.
