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La ausencia de Sarmiento evalúa al Lucena en Écija

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La escuadra celeste, que encadena seis semanas sin ganar, se enfrenta a un rival sumido en una crisis

Día 15/01/2012

Dice la historia y sus anales que el Lucena nunca ha sido capaz de ganar en el estadio de San Pablo, el escenario de su primer encuentro en Segunda B en el verano de 2007. Tal vez, hoy tenga una de las mejores opciones de desquitarse de tal espina, puesto que clasificatoriamente llega mejor que un rival sumido en una crisis de resultados a tener muy en cuenta.

Pero tampoco se puede decir que el Lucena esté atravesando por su mejor momento en el mismo apartado. El cuadro celeste encara este compromiso después de encadenar seis semanas sin conocer la victoria, circunstancia que le ha impedido poner tierra de por medio en la lucha por disputar el «play off». Y es que, finalizada la primera vuelta de la Liga, los aracelitanos están cuartos.

Por lo tanto, el partido de esta tarde es una revisión muy real a sus opciones de cara a lo que suceda en el mes de mayo. El Lucena está en la obligación de oficiar de equipo superior y jugar con la ansiedad de un rival que ve muy de cerca al espectro de la Tercera División.

Pero el Lucena de hoy se va a presentar sin el concurso de dos de los jugadores que en la primera vuelta le han aupado a lo más alto. Sarmiento, que es su alma y la mano derecha de Carrillo sobre el campo, no ha superado las molestias en el cuádriceps y quedó excluido de la lista. En su lugar, salvo rareza, se espera a Toni Seoane, un joven del que aún se espera mucho y no sólo en Lucena.

Además, la gran sorpresa es la ausencia de Hugo Díaz. Aparentemente, todo responde a la decisión técnica del entrenador, si bien sorprende que el afectado sea el máximo goleador de la plantilla. Javi Lara o Fede se disputarán su plaza, acompañando a Matías Saad y Quini. Por lo demás, se espera el retorno al eje de la zaga de Curro Vacas, ausente en el choque ante el Caravaca por sanción, y Vargas será el portero suplente.

Pero si el Lucena tiene alguna que otra interrogante, su adversario es una especie de duda metódica. Al menos, así ha quedado claro durante la semana, ya que lo primero que sucedió fue la destitución de Luis Cazorla tras la derrota de la escuadra astigitana ante el Cacereño (0-2). El entrenador se ha negado a firmar el finiquito, por lo que Miguel Rivera, el gran aspirante al banquillo azulino, deberá de esperar su turno y Juan Ramón, el secretario técnico, tendrá que hacer esas funciones.

Entre sus primeras obligaciones, está buscarle sustitutos a Ramón y Moya, quienes fueron expulsados en el último partido. Sólo queda claro que Fran Mancilla será el encargado de defender la portería, mientras que para el centro del campo tienen sus opciones varios jugadores, entre los que están Nando o el cordobés Rafa Requena. Pero esa carta quedará tan guardada como la convocatoria, ya que todos han sido citados. Por cierto, que el ataque podría estar configurado por Juan Pablo, que vistió de celeste, y Honorio, aquel delantero que frustró las opciones de ascenso del entonces Atlético Lucentino en Zafra. Aunque de eso ha llovido tanto que ahora el Lucena sólo piensa en ganar en Écija y asentarse entre los primeros del grupo IV de Segunda B.

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