El de ayer podría haber sido el último desayuno servido en el Hotel «Ciudad de Lucena», de 140 habitaciones, el más grande del sur de la provincia. Fuentes de la dirección del establecimiento hotelero confirmaron el cierre tras el expediente de desahucio dictado a instancias de la empresa propietaria: Prestige Hotels. Desde ayer, los distintos buscadores especializados en interno no permiten realizar reservas online.
Según las mismas fuentes, la hasta ayer concesionaria -«Viperaos S.L.-, del grupo Horizonte Verde, -que retomó en noviembre de 2010 la actividad del establecimiento, cerrado durante meses-, habría acometido importantes inversiones para la mejora de las instalaciones, tras alcanzar con los propietarios «un pacto de caballeros» con el objetivo de ir descontando el importe de las mismas del canón a pagar.
Sin embargo, Prestige Hotels, según la información a la que ha tenido acceso este periódico, parece haber exigido el pago del arrendamiento, lo que ha derivado en una denuncia por inpago y en el posterior desahucio.
Las fuentes consultadas señalaron que la cadena Prestige Hotels se ha negado a pactar una salida negociada a este problema, por lo que sospechan que la empresa catalana pueda disponer de otra empresa que desee explotar el establecimiento con mejores condiciones económicas que las pactadas con Viperaos o incluso que hayan encontrado un comprador para las instalaciones.
El Hotel Ciudad de Lucena tenía cerradas numerosas reservas de grupos de turistas y celebraciones para los próximos meses, que están intentando recolocar en otros establecimientos de la ciudad. Con el cierre de las instalaciones, el hotel dejará sin empleo a unos veinte trabajadores.
El alcalde de Lucena, Juan Pérez (PSOE), se mantuvo durante todo el día de ayer en contacto con los titulares de las empresas arrendataria y arrendadora para intentar canalizar un principio de acuerdo que permita evitar el segundo cierre del hotel. Pérez indicó que «será difícil retomar el diálogo, aunque vamos a seguir buscándolo desde el Ayuntamiento mientras haya esperanza». Según el regidor lucentino, en caso de consumarse definitivamente la clausura del establecimiento «sería una mala noticia para Lucena, una ciudad para la que un establecimiento de esta categoría, instalaciones y tamaño es de vital importancia».
Hace tan solo seis meses, Vicente Romero, consejero delegado de Viperaos, desmentía los rumores sobre un posible cierre del hotel. Según Romero, las previsiones para este año eran «halagüeñas» y el establecimiento tenía cerradas reservas para más de 4.000 personas a partir de febrero, fundamentalmente gracias al programa «Andalucía sin maletas», dirigido a touroperadores extranjeros.
Durante el año 2011, el hotel registró 23.810 pernoctaciones, que generaron unos ingresos totales de 500.010 euros, mientras que la previsión para el presente año, basada en reservas reales, alcanzaba a primeros de febrero las 32.789 estancias, lo que suponía un 37,7% de incremento, con unos ingresos estimados de 688.569 euros.
