—¿Cuál ha salido el balance de 2010 para el grupo?
—La cifra de ventas de Cafento ha sido similar a las del 2009, a pesar de que nos penaliza una subida del 50 por ciento en nuestra materia prima. Nuestra cifra de empleados es de 425 y tenemos tres fábricas, en Asturias, Valencia y ahora, Granada. Nuestras líneas estratégicas están dirigidas a influir en el desarrollo del mercado del café con nuestra experiencia, productos, servicios e implicación con los clientes; siendo capaces de anticiparnos a los cambios en la sociedad, aportándoles diferenciación con respecto a sus competidores.
—¿Cómo se traduce eso en la facturación del pasado año?
—Fue de unos 66 millones de euros. Pero para desarrollar nuestro proyecto debemos de tener una facturación superior a 120 millones de euros, para lo cual desarrollaremos un plan estratégico.
—Cafés Lugomer se une al proyecto Cafento. ¿Cuál es el objetivo de esta adquisición?
—Gracias a una marca como Lugomer, creada hace más de 125 años, y con un equipo humano de 100 personas, podemos llegar a un mayor número de establecimientos desarrollando conjuntamente nuestro proyecto. Los clientes de la marca Lugomer podrán acceder a la gama de cafés, tés e infusiones y chocolates más amplia del mercado.
Buena acogida
—¿Cómo ha sido la acogida de la operación por el accionariado?
—Bueno, es una integración que los accionistas han acogido con una gran ilusión, ya que siguen dentro del equipo humano de Cafento.
—¿La llegada de firmas externas al Grupo podría dificultar la identidad y filosofía común que la entidad ya posee en el mercado?
—Cafento es el resultado de la unión de muchas empresas familiares, y por eso, seguimos siendo una empresa familiar y cafetera. Aquí trabajamos con más de 20 marcas, tanto locales como nacionales.
—¿La estrategia comercial es potenciar su presencia en Andalucía?
—Sí. Andalucía tiene algo más que 7 millones de habitantes y un consumo per cápita de los más altos de España, con una cultura del café muy desarrollada y con un gran interés en formarse y en saber más sobre el café y sobre el espresso, en particular.
—¿Precisamente, en qué consiste el proyecto Stracto?
—Es nuestra marca de café en cápsulas; un verdadero espresso de cafetería. Con nuestro equipo de baristas, y con la colaboración de Luigi Lupi, posiblemente una de las personas que más sabe de este tipo de café del mundo, hemos logrado el espresso perfecto, con la ventaja de poder disfrutar de un resultado profesional en cualquier lugar. Con la alianza entre Fagor y Stracto ofreceremos a todo el público un verdadero café espresso para el hogar. Al comercializar nuestras cápsulas en establecimientos de Horeca les ayudamos a llegar a esos clientes, aportándoles, así, tráfico a los establecimientos.
—¿Qué inversión será necesaria para ejecutar su impulsión?
—Stracto será una de nuestras mayores palancas de crecimiento en los próximos años, para lo cual hemos presupuestado un total de 12 millones de euros, que se invertirán en los próximos 3 años.