Dejó la política municipal, donde llegó a ser concejal del PSOE en la localidad de Peñarroya-Pueblonuevo entre 2003 y 2005, para hacer carrera como administrador de cuatro empresas especializadas en formación. Y, a juzgar por el espaldarazo económico que está recibiendo por parte de la Junta de Andalucía, a Mauricio Antonio Montiglia Fischmann, no le ha ido mal el negocio.
De nuevo, el reparto discrecional de las ayudas públicas a la formación se encuentra en el punto de mira. El escándalo estalló a raíz de la dimisión en octubre pasado de Rafael Velasco, vicesecretario general del PSOE de Andalucía y mano derecha del presidente José Antonio Griñán. Velasco dimitió también como diputado autonómico al salir en los titulares de prensa que su esposa regentaba una academia de formación que recibió una cuantía parecida, 730.000 euros, durante los últimos cuatro años para cursos para reciclar a desempleados.
Montiglia, a diferencia de Velasco, no ha estado en la primera línea política. Su paso por el PSOE municipal en su pueblo fue efímero. Sus desencuentros con la alcaldesa socialista del municipio, Luisa Ruiz Fernández, precipitaron su salida de la Corporación.
Pero, a cambio, se ha hecho con una buena agenda de contactos. Gozaba de unas relaciones fluidas con Andrés Luque, quien entonces era delegado de Empleo y en la actualidad ocupa un alto cargo en la Consejería de Cultura —director general de Innovación e Industrias Culturales—. Entre 2006 y hasta este mismo año, el citado departamento de la Junta le ha concedido una suma total de 832.000 euros en subvenciones para impartir cursos a desempleados de la zona del Guadiato, donde el cierre de las antiguas minas de carbón ha abocado al precipicio del paro a miles de familias. Donde la Junta ya ha invertido en los últimos años millones de euros en la comarca, declarada zona preferencial Atipe.
Entramado de sociedades
A pocos meses de abandonar su cargo público, en octubre de 2006, la Administración autonómica lo subvencionó con 185.362 euros, según una orden de Empleo publicada en el Boletín Oficial de la Junta. Montiglia, que se inició en el negocio de los cursos de Formación Profesional en 1998 —a este año se remontan las primeras ayudas concedidas por la entonces Consejería de Trabajo e Industria—, ocupó el quinto puesto en la candidatura que presentó el PSOE a las municipales en 2003 y se hizo cargo de Medio Ambiente.
Tras su paréntesis como cargo público, Montiglia retomó su actividad, primero como autónomo y más tarde a través de un entramado de sociedades mercantiles.
En el listado de subvenciones que distribuye el Servicio Andaluz de Empleo constan como beneficiarias de las ayudas autonómicas tres empresas: Centro de Formación Info-Net para el desarrollo de las Nuevas Tecnologías, Centro de Formación Integral del Guadiato y Black Diamond Consulting SL.
Esta última firma actúa también como intermediación en el ámbito de la enseñanza no reglada especializada en nuevas tecnologías. Sin embargo, pese a su corta trayectoria —lleva dos meses funcionando— y tras echar a andar con un capital social de apenas 3.000 euros, ello no le ha impedido recibir 68.000 y 139.460 euros —207.460 euros en total— de una tacada gracias a una resolución firmada el 31 de enero pasado por el actual director provincial del SAE y delegado de Empleo, Antonio Fernández, un histórico dirigente del PSOE cordobés y ex alcalde de Pozoblanco.