El depósito aduanero de Lucena, creado por el Ayuntamiento a través de su Agencia de Innovación, AGIL, aspira a convertirse en uno de los referentes en materia de importación y exportación de mercancías en el centro de Andalucía gracias a la alianza estratégica entre esta empresa municipal y la firma Aducerco, titular de las franquicias del sector logístico Schenker-Spain Tir. El acuerdo, firmado por un periodo de 10 años, ha sido ratificado en el Consistorio lucentino por el presidente de AGIL y concejal de Fomento, Francisco Algar, y los responsables de la empresa logística Rodrigo y Tomás Aranda.
Según explicó Algar, el acuerdo supondrá a partir de abril, el traslado de las instalaciones del depósito aduanero lucentino a las instalaciones de Schenker-Spain Tir, en el parque empresarial Príncipe Felipe.
Con el acuerdo, el depósito, pionero en Andalucía, donde sólo existen algunos de carácter privado vinculados a sectores productivos muy concretos y los públicos de capitales como Málaga o Sevilla, verá multiplicado su potencial de negocio gracias a unas instalaciones mucho más amplias, con 5.000 metros cuadrados de parcela, 2.000 metros cuadrados de zona de carga y descarga y depósito de mercancías. Además el convenio pone a disposición del depósito aduanero casi una veintena de empleados, entre personal de oficina, carretilleros y conductores, una importante flota de vehículos y un servicio más personalizado a las empresas andaluzas que deseen utilizar el depósito para sus operaciones de importación y exportación de materias primas y fabricados.
Según Rodrigo Aranda, responsable de Aducerco la operación pone al alcance de las empresas cordobesas y andaluzas una herramienta para favorecer su internacionalización obteniendo importantes ventajas económicas y fiscales.
Aducerco cuenta con instalaciones en el puerto de Málaga y los centros de transportes de la capital sevillana y Córdoba, a los que suma sus dependencias en Lucena. El acuerdo se produce después de que AGIL finalizará el acuerdo suscrito hasta ahora con la firma norteamericana UTI SLI, con la que no se han alcanzado las expectativas iniciales de uso de esta infraestructura municipal.