Entrado el año 2007, el alcalde de Cañete de las Torres, Diego Hita Borrego (PA), ilusionó a todos los vecinos con la ejecución de un «mega-proyecto» que pretendía construir un parque empresarial de 227.000 metros cuadrados, con fachada hacia la A-306 en dirección a Jaén, así como ejecutar hasta 26 viviendas para jóvenes menores de 35 años o personas en situación de extrema pobreza o discapacidad.
La iniciativa comenzó a cobrar forma y se creó la empresa mixta «Proyectos Cañete», así como su consejo de administración, que por entonces lo integró en un 51 por ciento el propio Ayuntamiento. El porcentaje restante lo compartían por igual la cooperativa olivarera «Nuestra Señora del Campo» y Grupo Manuel Palma, SLU. Ya en julio de ese mismo año, los tres socios realizaron la presentación de «Proyectos Cañete».
Pero pasaron hasta dos años, y los ciudadanos no recibían explicaciones por la ausencia de los proyectos prometidos. Incluso, en octubre de 2010, el Ayuntamiento llegó a perder el control de esta empresa mixta, que quedó en manos de la entidad privada, en concreto, del Grupo del ex presidente del Córdoba CF.
Manuel Palma Marín +aprovechó la falta de liquidez para inversiones del Consistorio cañetero para proponer la adquisición del porcentaje económico previsto que aportara el Ayuntamiento, un total de 500.000 euros, que se iban a destinar a la adquisición de terrenos del parque empresarial y viviendas VPO. Poco después, la situación de crisis económica empezó a asfixiar a todos los integrantes del proyecto, tomándose nuevas decisiones. Así, Palma-Marín abandonó el proyecto y, a continuación, la cooperativa, que, eso sí, logró arrancar un acuerdo para que «cuando el proyecto se haga», según apuntó a ABC Ramón Hernández, presidente de la sociedad, las instalaciones de la factoría aceitera se trasladen hasta el parque empresarial.
Por tanto, alcalde y Ayuntamiento se quedan solos, teniendo que hacer pública una empresa que comenzó mixta y pasó a ser privada en un extraño vaivén que demuestra lo frágil del proyecto. La última vuelta de tuerca, sospechosa a escasos dos meses para las próximas elecciones municipales, es el acuerdo plenario para modificar el proceso de ejecución del parque empresarial, que pasará a hacerse en varias fases.
Según ha podido saber este periódico, el Consistorio adelantará los costes de la inversión, para recuperar lo invertido una vez culmine el proyecto. Lo peor es que, tras cuatro años de falsa ilusión, la realidad es que «Proyectos Cañete» podría convertirse en una fachada electoral de Diego Hita (Unión Andaluza), tan grande o más que la fachada de 1,5 kilómetros que se pretende tenga, algún día, ese parque empresarial.