Representa a la nueva esperanza del cordobesismo. Joven con talento y físico para desafiar a lo que se le ponga por delante. Jémez y los veteranos ya han tomado nota de él
Día 20/07/2011 - 09.22h
En el Córdoba CF se ha buscado históricamente a una especie de líder que catapulte a su primer equipo desde la cantera y todas las miradas apuntan a Fede Vico. Internacional sub 17 con España, empieza a postularse como una seria alternativa dentro del Córdoba con su potente físico y su pierna izquierda. Por lo pronto, empieza a sobresalir en La Manga.
—¿Por qué se le ve tan fresco en los entrenamientos?
—Pues estoy tan cansado como cualquiera de los compañeros. Esto es exigente para todos.
—¿De verdad que no ha realizado ningún entrenamiento extra con vistas a venir a la pretemporada en mejores condiciones?
—Los entrenamientos con el equipo juvenil terminaron en junio. No hace ni dos semanas de eso, mientras que el primer equipo tuvo casi un mes porque acabó la Liga el 4 de junio. Sólo he ido a correr en un par de ocasiones y también al gimnasio, pero nada en especial. No me he dedicado a correr para venir aquí.
—Por lo demás, ha pasado un verano difícil por aquello de la renovación de su contrato. ¿Llegó a pasarlo mal en algún momento?
—Siempre he querido jugar en el Córdoba, por eso he estado preocupado al comienzo del verano. No tenía claro qué era lo que nos podría pasar. Hasta que llegó el acuerdo, pasas algo de tensión. Pero tampoco mucho más.
—¿Y pudo dormir bien en el tiempo en el que se decía que muchos grandes se peleaban por llevárselo?
—Sí. Si no se te sube a la cabeza con 17 años puedes actuar con normalidad.
—La de nuevos amigos que le habrán salido en este tiempo.
—En este tiempo pueden salirte colegas. Los amigos de verdad son los que tienes siempre, aunque es evidente que sí ha habido gente que se ha querido acercar mucho más a mí.
—¿Sabe que está causando sensación en el stage?
—Me siento a gusto con lo que estoy haciendo ahora mismo con el equipo. Creo que estoy entrenando bien y ya sólo queda que lo pueda demostrar en los partidos, si es que dispongo de minutos para poder hacerlo.
—¿Sabe que insisten mucho en ese asunto los veteranos del plantel?
—Si es verdad que ya lo han dicho, sólo puedo tomármelo como un halago; aunque posteriormente también debo corroborarlo sobre el campo de juego. De no ser así, no vale de nada.
—¿Más responsabilidad entonces al saber que no hay prisas por fichar a un extremo zurdo?
—Confían en ti y tú debes demostrarlo. De todos modos, sabemos que el club está mirando el mercado para potenciar a la plantilla.
—¿Ha escogido número?
—El que tenía la temporada pasada, el 29. Fue con el que he debutado y no he querido mirar más allá.
—¿Cómo es su fútbol?
—Aquí trabajamos para demostrar lo que sabemos hacer. Para eso están lo partidos e intentaremos que lo de los entrenamientos no se quede en una simple anécdota. Al menos, parto con esa idea.
—¿Qué le transmite el míster?
—¿Paco? Muy bien, me encanta la filosofía de juego que nos intenta inculcar a la hora de enfocar el juego. Esperemos que todo salga bien.