La burocracia primero y la crisis después frenan en seco proyectos comerciales por un valor próximo a 300 millones
Día 07/12/2011 - 09.22h
Si bien es verdad que el Hipercor —que prácticamente se está rematando—, el Decathlon —ya en funcionamiento— o Leroy Merlin —que prevé abrir en marzo del año que viene— son algunos ejemplos de que Córdoba puede ser un lugar atractivo para la captación de oportunidades, la historia de esta ciudad está plagada de otros proyectos empresariales que han acabado encallando en el denso mar de la burocracia, retrasando su agonía hasta el infinito o, en algunos casos, acabando por abandonarse en el olvido.
Es el caso, sin ir más lejos, del centro comercial que la firma Montealto preveía levantar en Chinales, en los suelos donde antes se ubicaba la empresa Pérez Giménez, con una inversión de 90 millones de euros para un complejo que iba a ocupar 54.000 metros cuadrados en tres plantas. El proyecto fue aparcado en junio de 2010 «sine die».
Otro tanto ocurre con la iniciativa de 3C Development en el polígono Carretera de Palma. A principios de 2010 la empresa consideraba que su idea de un centro de compras de 35.750 metros cuadrados y una inversión de 82 millones de euros podría estar suficientemente madura como para iniciar las obras a mediados de 2011. Pero las negociaciones con las distintas firmas para su ubicación parecen no haber cuajado todavía, ya que las negociaciones con su abanderado, Aki Bricolaje, no han llegado aún a buen puerto.
Nuevo impulso
Otra afectada por la recesión era el centro comercial denominado «a4tro», impulsado por Duprocom junto al polígono de Las Quemadas. En octubre de 2009 sus promotores decidieron paralizar todos los trámites, pero en mayo pasado volvieron a reactivar el proyecto tras obtener la licencia comercial por parte de la Junta. Así, las obras podrían comenzar en el segundo trimestre de 2012 para una superficie de 36.000 metros, un desembolso de 80 millones de euros y unos 2.000 empleos.
Igualmente, la firma Euro Depot, con su marca Brico Depot, especializada en muebles y equipamiento del hogar, se planteó en 2009 abrir un establecimiento junto al polígono de Santa Marta sobre una parcela de 6.000 metros cuadrados. El proyecto iba a contar con dos plantas, 225 plazas de aparcamiento y otras 119 para bicicletas, pero la crisis ha dejado esta iniciativa a un lado.
Pero aún hay más. En los terrenos que ocupan los actuales campos de fútbol del complejo Enrique Puga, en la zona de Santuario, se proyectó en su día una galería comercial con aparcamientos y equipamiento deportivo que, además, se pretendía conectar con el centro comercial El Arcángel mediante una pasarela. Nada más se supo.