Día 08/03/2012 - 09.38h
El cuñado de José Bretón, marido de su hermana Catalina, José Ortega, compareció ante el juez inquieto, según las fuentes consultadas por ABC. Sin parar de gesticular y apretando su abrigo, relató que días antes a la desaparición, Bretón le dijo que «iba a preparar algo. Me comentó que pediría la custodia de los niños y que iba a sacar todo (en alusión a los trapos sucios de su matrimonio y de su mujer, Ruth Ortiz)». José Ortega estuvo presente durante uno de los primeros registros que se hicieron en Las Quemadillas, «y es cierto que le dije que si no tenía nada que ver con el caso, me diera una hostia». Explicó que su pensamiento ese día se contagio del «ambiente» generado por la Policía, que apuntaba al progenitor como el responsable de todo. El cuñado aclara, no sin dificultad, que «mi intención era la de agotar todas las posibilidades, pero no es que dudara de José». En este sentido, manifestó al togado que «creo que alguien ha cogido a los niños, bien para hacerle una faena a José o para lo que sea», porque «no me creo que él (Bretón) les haya hecho algo». Por lo que siempre ha apreciado, «lo considero un buen padre. Siempre se encargaba de ellos y se preocupaba de ellos».




