UE-Pacto-Verde
Presentación de las estrategias contempladas en el Pacto Verde Europeo / Agrónoma
«De la granja a la mesa»

La UE radicaliza su estrategia «verde» y condena al agro andaluz

La Junta liderará un frente «para corregir todo lo que dañe al sector productivo regional»

23 mayo 2020, 09:00

La presentación en Bruselas de las estrategias «De la Granja a la Mesa» y la «Biodiversidad en el Horizonte 2030», contempladas en el marco del Pacto Verde Europeo, suponen una honda preocupación en el campo andaluz, ya que estos documentos guiarán las políticas europeas en todo lo concerniente a la producción y distribución de alimentos y marcarán el devenir de la futura PAC.

El contenido de estas estrategias, todavía en borrador, plantea que al menos un 25% del total de la superficie agraria de la Unión Europea (UE) sea ecológica en el año 2030, que el 10% de las tierras agrarias se destinen a elementos no productivos, que el uso de abonos se reduzca en un 20% y el de fitosanitarios se recorte en un 50%, así como que se abra la posibilidad de incrementar hasta un 30% las zonas incluidas en Red Natura 2000, con las limitaciones que de ello se derivan para la actividad agrícola y ganadera.

Además, desprotege aún más al sector ganadero, abogando por reducir el consumo de carne, revisar las campañas de los programas de promoción de los productos cárnicos, e incluso una limitación de las ayudas asociadas a los sectores ganaderos productores de carne en el marco de la PAC.

Reacciones

Las reacciones no se han hecho esperar y la consejera de Agricultura, Carmen Crespo, ha anunciado que «Andalucía liderará un frente para amortiguar la nueva estrategia de la UE, que condena al sector productivo andaluz».

En este sentido, Crespo ha explicado que «desde Andalucía queremos una agricultura más sostenible desde el punto de vista medioambiental y social, pero no que sea a costa exclusiva de nuestros agricultores». Hay que hacerlo «fijando unas fechas determinadas y de forma paulatina», porque de lo contrario, «Europa está condenando con estas propuestas a los agricultores competitivos y a los que quieren exportar».

La consejera estima que la propuesta carece de «alternativas» porque «todos queremos productos más sostenibles y de calidad, algo que no está reñido con una agricultura y una ganadería competitivas como las que se desarrollan en Andalucía», ha enfatizado.

Con esta defensa, la titular de la Consejería coge el guante lanzado por la patronal agraria Asaja, que «instó al presidente de la Junta a situarse al frente de la defensa del sector agrario andaluz», ya que «estos documentos constituyen un cúmulo de despropósitos que se traducen en más trabas, cortapisas y condicionantes al sector agrario, reduciendo con ello nuestra autonomía alimentaria e incrementando la dependencia de los ciudadanos europeos de las producciones de terceros países», señala el presidente de Asaja Andalucía, Ricardo Serra. Recuerda, además, que por imperativo de la UE, «el modelo productivo andaluz es posiblemente el más exigente y respetuoso con el medioambiente y el bienestar animal».

Crisis sanitaria

Asaja lamenta que con este tipo de mensajes «la Comisión Europea ningunea el esfuerzo y dedicación de los agricultores y ganaderos, especialmente durante los momentos más críticos de la crisis provocada por la pandemia del Covid-19, que han estado en primera línea para aportar seguridad y tranquilidad a los más de 500 millones de ciudadanos europeos, garantizando un abastecimiento diario de alimentos». Por ello, Serra insiste en que «la salud y la alimentación de la población europea no pueden estar en manos de terceros países».

Por su parte, la organización COAG comparte los objetivos de la estrategia «De la Granja a la Mesa» pero difiere claramente en la forma en la que se pretenden abordar. Así, señala que «resulta incoherente que la UE pretenda que los agricultores afronten los retos de un sistema alimentario más sostenible, con el consiguiente aumento de costes que eso supone, bajo la amenaza de recortes en el presupuesto comunitario para el periodo 2021-2027 y la destructiva competencia desleal de las importaciones de terceros países», afirma. Por ello, aclara que «no vamos a permitir que los agricultores financien una vez más las políticas de escaparate verde de la UE».

Desde el sector cooperativo también muestran su compromiso con el Pacto Verde, pero reconocen que «la sostenibilidad medioambiental no será posible sin sostenibilidad económica».

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