La Asociación Estrella Azahara ha organizado una fiesta por su trece aniversario que ha reunido a voluntarios, colaboradores y los propios protagonistas, los vecinos de Las Palmeras, en un día de convivencia en Los Villares. Esta cita celebra también que la entidad se encuentra en uno de los momentos de mayor visibilidad como semilla del cambio en el barrio.

La directora de Estrella Azahara, Alba Aranda, señala que han empezado este curso escolar «con un empujón muy fuerte gracias a la cantante India Martínez y su disco, en el que habla del barrio y nos contactó para acompañarla en su presentación. También hemos logrado quedar terceros en la convocatoria "Diseña el cambio" con nuestro proyecto para mejorar los columpios del barrio y los niños fueron a presentárselo al Papa a Roma. España y el mundo entero ha podido ver lo que hacemos», 

Aranda resume de esta manera el presente de la entidad con agradecimiento y mira su trayectoria señalando un logro clave: «convertir a los vecinos en sus propios agentes de cambio, que todo empiece con ellos. Que sean referentes».

En este sentido coincide con el joven Rica Alfonso, que trabaja como monitor de la asociación en el proyecto «Yuvatá» para movilizar a los jóvenes. «Estrella Azahara representa la transformación desde dentro en este barrio», su barrio, «apuestan por nosotros y nos brindan oportunidades como la que yo tuve, de promocionar y seguir trabajando con ellos para enseñarles buenos referentes, que se puede conseguir».

Aparte de la dinamización juvenil y de iniciativas para mayores, el proyecto más importante de Estrella Azahara es la atención educativa a los menores con clases de refuerzo, actividades de ocio y tiempo libre y talleres formativos. En esta iniciativa se encuentran las hijas de Rafi Valderrama, de 10 y 15 años. «Les ayudan con sus tareas, aprenden técnicas de estudio y aprenden en talleres valores y buenos hábitos. Para mí, como madre, esta ayuda significa todo porque yo no podría darles ese apoyo», reconoce Valderrama.

La voluntaria de la asociación Rocío Seco, es una de las que colaboran en el proyecto de refuerzo escolar. Ella misma fue un día alumna en estas actividades y ahora dedica su tiempo a devolver la ayuda que recibió. «Se nota mucho el apoyo y la motivación que reciben para seguir aprendiendo», comenta la joven y la fiesta de ayer en Los Villares se esperaba con gran ilusión, según Seco.

La directora de Estrella Azahara señala que es un momento para ver el fruto de tantos años, «ahora que niños que llevan en la entidad entre diez y trece años se involucran siendo voluntarios, participando en campamentos, escuelas de verano... como las hijas de Rafi Valderrama, Rica Alfonso o Rocío Seco. El cambio lo vemos en ellos mismos y es muy positivo», concluye Aranda.