Nissan amplía la oferta Micra con un 1.2 tricilíndrico de 12 válvulas, esencialmente idéntico al 1.2 que vendía hasta ahora desde el debut del modelo, pero diferenciado por la inclusión de sobrecompresión y sistema de parada y arranque automáticos de motor. Se llama Micra DIG-S, rinde 98 CV y un par límite de 142 Nm y cuesta 1.200 euros más a igualdad de equipamiento que la variante de 80 CV (por lo que los precios del Micra con este propulsor arrancan en 12.100 euros), muy agradable en toda circunstancia pero apreciablemente menos capaz que la nueva mecánica para abordar travesías de medio y largo alcance, esencialmente por su mayor y más contundente reprís.
Para hacerse a la idea, ligado a una caja de cambios manual de 5 relaciones (también puede hacerlo opcionalmente a otra automática mediante variador continuo CVT) consigue 180 km/h de máxima, con un 0 a 100 km/h de 11,2 segundos y un promedio de gasto de 4,1 a 4,3 l/100 km (95 a 99 g/km) según si calza llantas de 14 o de 15 pulgadas. Considerando que el de 80 CV requiere un gasto medio de 5 l/100 km (como el DIG-S automático, que homologa 175 km/h y 11,9 segundos en el 0 a 100 km/h), la nueva variante supone una buena alternativa a motores diésel de utilitarios similares, tipo Seat Ibiza o Toyota Yaris.
Toda la gama (Visia, Acenta y Tekna) se beneficia de airbag de cortina, y desde el nivel intermedio de Bluetooth, volante multifunción, radio-CD y llantas de 15 pulgadas, a los que el tope de gama añade sensores de luces y lluvia, calculador del hueco de aparcamiento en línea PSM a partir de sensores laterales incrustados en los paragolpes, control de velocidad, navegación Nissan Connect...
