El Consistorio busca resolver el eterno problema del complejo congresual. ¿La fórmula? Más socios, mayores aportaciones de Junta y Gobierno y, quizás, recortar el proyecto
Día 01/08/2011 - 09.16h
El 13 de junio, el nuevo alcalde, José Antonio Nieto, realizó su primera comparecencia pública. ¿Y a qué dedicó gran parte de su tiempo? A la cuadratura del círculo o, mejor dicho, del centro... Concretamente, el de congresos. Este equipamiento es una ecuación de difícil solución. De hecho, los tres anteriores gobiernos municipales de izquierdas no lograron despejarla.
La formulación del problema sería la siguiente: su ejecución cuesta 61 millones. El Gobierno central pone 9 millones y la Junta 18. El Ayuntamiento aporta el resto. Pero el actual equipo rector de Capitulares considera que, dada la crítica situación de las arcas locales, según la reciente auditoría, afrontar el proyecto con el actual reparto de cargas le supondría al Consistorio un quebranto tremendo. Además, para ahorrarse el IVA de la obra (otros 11 millones), el Centro de Congresos debe ser gestionado desde lo público. Y esto último también hay que pensárselo bien, porque un estudio de Urbanismo indicó que su explotación será deficitaria 15 años.
Por ello, desde ese 13 de junio, Nieto y el equipo que dirige Capitulares intentan aportar variables que hagan posible que el equipamiento salga adelante, aligerando la aportación municipal. Así, el citado día, el primer edil propuso explorar que la financiación privada entrara en la operación. Eso sí, reconoció la dificultad de hallar a una firma interesada en embarcarse en una actuación de este tipo en estos tiempos.
Igualmente, planteó que la Diputación, controlada tras el 22-M por el PP con mayoría absoluta, entrara a colaborar en el proyecto. Además, también comunicó que le iba a remitir una carta al presidente de la Junta, José Antonio Griñán, para solicitarle un aumento de los fondos conveniados en marzo de 2011. Ahora bien, ese convenio fijaba octubre como fecha tope para iniciar las obras y hacer factible las subvenciones. Ambas cuestiones están en el aire. Eso sí, el pasado lunes, Nieto se mostró molesto por no haber recibido respuesta a su primera misiva y anunció que remitiría a Griñán una nueva reiterándole su deseo de tener un encuentro.
Tras el 13 de junio, hubo más novedades al respecto de las dificultades para acometer el Centro de Congresos. Con la auditoría sobre el estado de las cuentas de Capitulares, que encargó el nuevo gobierno municipal, se supo a mediados de julio que, de los 24,5 millones que debía haber disponibles ya para el proyecto, sólo quedaban 8,5.
¿Sin auditorio escénico?
Y en la segunda quincena del mes que acaba de terminar también fue tomando forma otra posibilidad para disminuir el coste del complejo: prescindir del auditorio en su dimensión de equipamiento escénico en el proyecto del Centro de Congresos. El sector hostelero había lanzado esta propuesta a primeros de julio y la edil de Turismo y diputada provincial de la misma materia, Rosario Alarcón, en una entrevista concedida a ABC apoyó ese posicionamiento. Los cálculos iniciales que maneja el Ayuntamiento apuntan a que desgajar el auditorio supondría un abaratamiento de la factura de, al menos, 7 millones. El propio edil de Urbanismo, Luis Martín, reconocía el 19 de julio que esta fórmula era «una de las posibilidades que se está estudiando para reducir» el presupuesto de construcción.
El último movimiento del gobierno municipal para intentar despejar esta ecuación «central» en la vida pública de Córdoba desde hace una década se dio en el Pleno del jueves. En él, se solicitó a la Secretaría de este órgano y a la Intervención un informe que indique si es viable acometer el complejo congresual.



