La manifestación de IU apenas reúne a veinte personas, que protestaron ante el desfile de la Guardia Real, ajena al homenaje a Cañero
Día 21/09/2012
Pues sí que ha sido un éxito la convocatoria, aunque no hay banderas, ni pancartas y la gente no tiene las pintas normales en estos sitios. Quien llegase a la cita de Caballerizas Reales esperando encontrar una concentración al estilo del 15-M y se acercase a eso de las siete de la tarde iba a ver desde luego a varias decenas de curiosos, pero con cámaras en las manos y pendientes más bien de los caballos y los carruajes que tenían que participar en la inauguración de Cabalcor. Hasta que faltaba poco para las siete y media de la tarde no aparecieron los primeros manifestantes contra el homenaje a Antonio Cañero, que en ningún momento superaron la veintena, y que portaban banderas del Partido Comunista y de la República Española. Eran muchos más quienes esperaban a ver el desfile de los animales.
A pesar de que era Izquierda Unida quien convocaba, sólo el coordinador local, Galileo Florido, hizo acto de presencia al principio, aunque se marchó muy poco tiempo después. El resto del tiempo no hubo ningún dirigente significativo.
Se presentaba entonces un problema: ¿ante quién protestar, si el homenaje era en el interior de Caballerizas?
Los manifestantes corearon sus consignas cuando comenzó el desfile de la Banda de Guerra de la Guardia Real, que no tenía que ver absolutamente nada con el homenaje a Cañero. Gritos de «¡Alcalde, fascista, Cañero asesino!», fueron los que tuvieron que escuchar los miembros de esta unidad, aunque eran muchos más quienes esperaban para admirar su desfile.
En el interior sí se celebró el sencillo homenaje, organizado por la Asociación de Criadores de Caballos, aunque el alcalde, José Antonio Nieto, se ausentó antes. Para entonces, la manifestación que debía mostrar la indignación del pueblo ya era historia.



